Las apuestas estaban todas en contra del Real Madrid. El CSKA era el claro favorito, por plantilla y por haber sido el líder en fase regular. Nada de eso vale cuando uno se enfrenta al Real Madrid. El equipo de Pablo Laso, una vez más, se coló en la final de la Euroliga. Ante tal logro, los jugadores merengues saltaron a zona mixta con el ánimo por las nubes y el objetivo común de levantar La Décima. Sergio Llull, Luka Doncic y Campazzo fueron algunos de los protagonistas de la noche en Belgrado.

DONCIC

"La pasada semifinal era buena y mala. Mala por perder y buena por aprender muchas cosas. Hay que salir con el corazón. Hay que dejarse todo en cada defensa. Una de las claves ha sido parar al Chacho. El domingo hay que jugar con el corazón".

CAMPAZZO

"Qué presión había, ¿eh? Me sentí muy bien, tenía la cuenta pendiente de jugar la F4. Lo disfruté mucho, me dieron mucha confianza. Lo importante es que se ganó. Hay que ser autocrítico también. Hicimos cosas buenas. No sabía si iba a estar, con la operación me veía hundido, no me sentía estable... pero llegué. Contento porque se hizo un buen trabajo. El Fenerbahçe demanda el cien por cien física y mentalmente. Tienen un gran poderío".

LLULL

 "Creo que hemos hecho un grandísimo trabajo. Durante todo el año me han apoyado mucho... es una Final Four muy especial para mí. He perdido unos 5 o 6 kilos en estos meses. La final va a ser otra guerra, esperemos ser mejores que ellos y ganar".

REYES

"Hay que estar contentos pero lo difícil es el domingo. Ha sido un partido muy completo. Este año hemos venido como tapados pero podemos hacer grandes cosas".

AYÓN

"No nos hemos desesperado con la desventaja del primer cuarto. Hemos ganado el partido en el rebote y defensivamente".

RUDY

"En el segundo cuarto hemos dado un paso adelante en defensa. Sabemos de la dificultad de jugar ante el Fenerbahçe. Sabemos que si jugamos como hoy, como un equipo, podemos lograr la décima".