El Real Madrid vuelve a tener un rival de gran nivel esta semana. Tras las dos últimas derrotas, el equipo blanco necesita volver a la senda de la victoria, pero no será fácil ya que reciben al CSKA de Moscú. No podrá contar con Sergio Llull otro partido más. Viendo sus números en varios de los apartados del juego, el cuadro merengue necesita al aeroplano de Mahón.
No es casualidad que el equipo blanco solo anotará 69 puntos en El Palau, ya que sin el '23' el equipo merengue pierde anotación, juego interior entre pívots y exteriores y una defensa más cerrada al no sentir el peligro de las 'mandarinas', algo que Pablo Laso ya se temía. Con el balear todo es diferente, una media de 4 asistencias más por partido cuando está en cancha y 8 puntos más.
No todo han sido malas noticias desde que Llull no se viste de corto, ya que Campazzo ha jugado grandes partidos y ha demostrado que la presión no le afecta en absoluto. Otra buena noticia ha sido Prepelic, ya que el esloveno ejerciendo en la posición de '1' ha demostrado su nivel y juego que cautivo a la directiva madridista para ficharlo hace ya un año. Tras la vuelta de Llull, hay muchos factores positivos a tener en cuenta.
Tavares y Ayón, los socios del '23'
Cuando el base está en cancha, los pívots se divierten. El de Cabo Verde aprovecha de gran manera los espacios que genera Llull, ya que impide ayudas de otros jugadores por su juego rápido y agresivo. Ayón es el otro pívot que disfruta con él, ya que el '23' deja libre al mexicano para desplegar su juego a la perfección.
La defensa rival: pendiente de él
Un gran dicho en el baloncesto es que siempre hay que buscar al hombre que esté solo. Pues con Llull es una situación que ocurre en la mayoría de los partidos, ya que su influencia es tan grande que atrae a varios jugadores en ayuda para la defensa, algo que aprovecha para surtir a sus compañeros de tiros liberados y en unas posiciones totalmente favorables.
El Facu tira del carro sin Llull
Uno de los jugadores que agradecerá la vuelta de Llull es el base argentino. Campazzo ha jugado muchos minutos en ausencia del balear y poder descansar con la seguridad de que Llull está en pista es mucho mejor. Su partido ante Olympiakos fue una obra de arte y ante el Barcelona no se cansó de intentarlo, una demostración que ante la falta de la estrella del equipo puede suplir con garantías una baja tan sensible. Sin embargo, sin Llull contra el CSKA, el Facu tendrá que ser uno de los que tiren del carro en el WiZink.
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