El Real Madrid volvía a la Liga ACB, donde necesitaban una victoria de prestigio para cumplir el objetivo de clasificarse como cabeza de serie para la Copa del Rey. Llegaba el Tecnyconta Zaragoza a Madrid, donde no gana un partido al campeón de Europa como visitante desde 1995. Los Okoye, Radovic y McCallebb llegaban con la única misión de pelear por entrar en la competición del KO, a pesar de que los locales solo se han dejado una victoria en su cancha. En un encuentro muy intenso, uno de los principales protagonistas iba a ser Randolph, que provocaría el estruendo de la afición al ver una de las canastas de la jornada. 

El gran objetivo del Real Madrid era cumplir el objetivo y no volver a tener despistes en la competición doméstica, que al contrario que en Euroliga, se está dejando victorias. El cuadro maño llega tras una victoria contundente frente al UCAM Murcia y caer en Valencia. 

Ambos cuadros llegaban con bajas muy sensibles. Carroll lleva recuperándose de su lesión en el glúteo derecho desde hace una semana y se perderá el tercer encuentro de forma consecutiva. Se espera que el escolta vuelva con el equipo la próxima semana. Pero el '3' no entiende de relajaciones y firmó una de las canastas del choque.

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