Durante los últimos años, el Real Madrid de baloncesto se ha mostrado como un modelo estable y, lo que es más importante, ganador. No solo ha sentado sus bases en buenos fichajes, sino que también se ha trabajado la cantera, y mucho. Si en 2015 el Junior ya ganó la Euroliga de su categoría, en 2019 va a luchar una vez más para conseguirla , y además llevarse, de forma contundente, el Adidas Next Generation de Munich.
Mariano de Pablos ha conseguido que un grupo de muy talentosos jugadores como Usman Garuba o Kareem Queeley se comporte como un equipo. A través de la disciplina, las grandes individualidades, en el mejor sentido de la expresión, ha pasado a actuar como una máquina bien engrasada.
El domino en la zona exhibido por los interiores, como el citado Garuba, Amar Sylla o Golden Dike ha sido clave para las grandes victorias madridistas, pero el juego no se centraba solo en eso. La presión grupal, coordinada perfectamente, a toda pista asfixiaba a los equipos rivales. Como ejemplo están los primeros minutos del choque contra el Alba de Berlín. Aunque el marcador estaba igualado pasados los primeros instantes, el Madrid tuvo rachas para colocarse con 4 - 10, por ejemplo, por esa presión. En ese sistema defensivo, cabe destacar el papel del mayor de los Garuba, que conseguía incomodar mucho a los bases alemanes con sus dos contra uno y larga envergadura para su edad- solo tiene 16 años-.
En general, el interior sobresalió sobre el resto de jugadores a lo largo de todo el torneo- razón por la que le nombraron el MVP-. Sus 16 puntos de media, gracias a un 75% de tiros de dos y un 40% de tiros de tres, se sumaron a un total de siete rebotes y cuatro asistencias. El center nacido en Madrid suele jugar en el equipo de EBA, sin embargo ya ha debutado a las órdenes de Pablo Laso, y en pretemporada ya causó muy buenas sensaciones con el primer equipo.
Pero este equipo es más profundo todavía. Kareem Queeley ha causado estragos desde la posición de escolta. Pese a que su porcentaje de lanzamiento de tres no ha ido demasiado alto durante el torneo, su capacidad atlética y calidad ofensiva general le ha permitido estar cerca del 70% de tiros de dos, y nueve tantos de media. Quizás lo más interesante de su actuación fue que tuvo su mejor partido en la final contra el Macabbi (15 puntos y 20 de valoración). Mario Nakic no tuvo su mejor día en el partido decisivo, pero su habilidad con el balón en las manos augura un gran futuro profesional.
Deni Avdija no fue suficiente para superar a los madridistas
En el partido contra los israelíes, la gran amenaza para los merengues era Deni Avdija. Pese a todo, el talentoso alero, que había promediado 26 puntos y 38 de PIR, se quedó en unos numeros inferiores, pero también muy destacables (18 tantos y once rebotes). Eso sí, el trabajo de los exteriores blancos fue incansable y el macabeo falló diez de los once triples que lanzó.
La siguiente parada será Vitoria. Después de ganar con comodidad el torneo celebrado en Múnich, el equipo afronta el bonito reto de volver a reinar en Europa. La última vez que el junior ganó el trofeo continental fue en 2015. En aquella ocasión, el líder del equipo era un prodigio que ahora milita en los Dallas Mavericks y está sorprendiendo a toda la NBA, Luka Doncic. El esloveno llevó a sus compañeros a una sufrida victoria contra Estrella Roja. Dos de sus compañeros más destacados fueron el actual alero del Tecnyconta Zaragoza, Jonathan Barreiro, y el pívot brasileño Felipe Dos Anjos.
[Más información: Garuba vuelve a deslumbrar: 33 de valoración en solo 18 minutos]
Noticias relacionadas
- El Madrid quiere mantener su ritmo en Liga ante la necesidad del Fuenlabrada
- Felipe Reyes iguala los 778 partidos de 'Chichi' Creus en ACB
- Enfado mayúsculo de Pablo Laso con sus jugadores: "Pediros unas palomitas"
- Las mejores imágenes del Real Madrid - Montakit Fuenlabrada
- Mate de concurso de Randolph: así fue su giro de 360 grados
- El mejor Llull da la victoria al Madrid y evita la sorpresa del Fuenlabrada
- Pablo Laso: "Ha habido dos partidos, el primer cuarto y el resto"
- Las broncas más famosas de Laso: de las lágrimas de Doncic a las palomitas