El tercer duelo de la eliminatoria entre Real Madrid y Panathinaikos no defraudó. El OAKA se preparó para realizar un emboscada al vigente campeón, que llegó con un 2-0 y con la serie muy de cara. El cuadro blanco confirmó su presencia en la próxima Final Four tras derrotar a los griegos gracias a un gran último cuarto. [Narración y estadísticas: Panathinaikos 82-89 Real Madrid]
El equipo blanco abrió el partido como un tiro, pero tras un mal segundo cuarto, el cuadro griego consiguió colocarse por delante en el marcador. El tercer cuarto fue muy igualado, hasta que en el último acto el base argentino y el pívot mexicano acabaron con las ilusiones del conjunto heleno.
El partido comenzó con ambos equipos muy erráticos de cara al aro, pero muy seguros a la hora de cuidar la pelota. Un tapón imperial de Randolph marcó rápidamente el territorio. No tardó Campazzo en dar los primeros puntos a su equipo, con un gran triple tras el despiste de la defensa griega y una asistencia prodigiosa a Tavares. La transición blanca confirmó que el Madrid salió con más revoluciones que el equipo local, que no igualó el ritmo en los primeros minutos (6-12).
Los fallos del Real Madrid en el triple dieron vida al cuadro heleno, que poco a poco y de la mano de Lojeski se metió en el encuentro. Los de Laso mantuvieron su buena defensa y así evitaron que su rival se acercara más en el marcador. El gran trabajo de Rudy Fernández, tanto en ataque como en defensa, devolvió a su equipo la diferencia en el luminoso.
El segundo acto mantuvo la misma intensidad en defensa, pero los griegos no consiguieron anotar en los primeros minutos, lo que hizo que la diferencia siguiese aumentando (18-27). Una caída de Rudy encendió las alarmas en el banquillo, pero el '5' pudo continuar sin ningún problema. La segunda unidad de Pablo Laso no defraudó y mantuvo a su equipo por delante en un ecuador de cuarto en el que la afición del Panathinaikos comenzó a jugar su propio partido protestando a los árbitros.
Gran reacción del Panathinaikos
La reacción local llegó de la mano de Langford, el escolta aprovechó los despistes de sus defensores para anotar varias canastas de forma consecutiva y acercar a su equipo (25-32). Trey Thompkins fue el gran baluarte ofensivo de su equipo, anotando canastas de gran calidad con una mecánica exquisita.
Los colegiados permitieron más contacto del habitual y las quejas de ambos equipos se incrementaron. Un 2+1 de Thomas y un triple impresionante del escolta belga cerraron un parcial de 16-2 en tan solo cinco minutos que devolvió la ventaja a su equipo muchos minutos después con una afición totalmente entregada a los suyos. Con ese gran nivel de juego, los hombres de Rick Pitino soñaban con alargar la eliminatoria.
Tras el paso por vestuarios el Madrid comenzó como un cohete, con dos rebotes ofensivos de Tavares y un triple de Rudy Fernández, que demostró que el OAKA es una de sus pistas favoritas. Poco tardó el Panathinaikos en recuperar su ventaja, con Calathes inspirado tanto en el lanzamiento como a la hora de repartir asistencias. Taylor mantuvo el nivel de los primeros dos partidos y castigó a sus defensores atacando el espacio.
La conexión Campazzo - Ayón
El ritmo fue altísimo y el '5' fue el encargado de mantener a su equipo en el partido, trabajando en ambos lados de la pista. Un toma y daca muy constante entre los dos equipos, que acabó con una gran canasta de Langford para recuperar los cinco puntos de ventaja (54-49). Los colegiados señalarían una técnica a Tavares, que fue provocado por su defensor, quien recibió un tapón del pívot de Cabo Verde. En un intercambio de canastas entre sus mejores tiradores, ambos equipos se fueron al último cuarto en tablas (58-58).
El último asalto comenzó con un recital de Ayón, que se colocó como principal protagonista de un partido vibrante y con muchas alternativas. Los griegos no se rindieron y a base de calidad individual colocaron otra vez el empate en el electrónico (64-64). La conexión argentina-mexicana fue clave para que el Madrid se colocase por delante a falta de 4 minutos para el final del choque.
Un triple de Campazzo colocó al Madrid muy cerca de la victoria, que paró todos los ataques griegos, consiguiendo así despegarse a falta de dos minutos (74-81). El Madrid consiguió una victoria vital y sigue con las opciones intactas de conseguir un nuevo trofeo europeo.
Panathinaikos 82-89 Real Madrid
Panathinaikos: Calathes (17), Gist (4), Lojeski (16), Papagiannis (4), Papapetrou (9) - quinteto inicial - Antetokounmpo (-), Kilpatrick (-), Langford (10), Lekavicius (3), Mitoglou (-), Thomas (11), Vougioukas (8).
Real Madrid: Campazzo (16), Rudy Fernández (16), Randolph (14), Tavares (3), Taylor (13) - quinteto inicial - Ayón (12), Carroll (2), Causeur (2), Deck (2), Prepelic (-), Felipe Reyes (-), Thompkins (9).
Árbitros: Luigi Lamonica, Matej Boltauzer, Emin Mogulkoc. Sin eliminados.
Parciales: 18-23 | 23-13 | 17-22 | 24-31
Incidencias: Partido correspondiente a los playoffs de la Euroliga disputado en el Olympic Sports Center Athens (Atenas, Grecia).