Pablo Laso, entrenador del Real Madrid, comentó antes de viajar a Vitoria para participar en la Final Four de la Euroliga que tenía "buenas sensaciones", que "el equipo está bien" y que no necesitaba "meter una guindilla en el culo a nadie para motivarle, porque es una Final Four".
"Las sensaciones ante la Final Four son buenas. El equipo ha trabajado mucho para llegar aquí, a donde sólo llegan los cuatro mejores equipos de Europa. Estoy orgulloso del trabajo hecho aunque esto no nos debe parar. Para ser campeón de Europa hay que ganar dos finales. El equipo está bien", dijo Laso.
El hecho de jugar en Vitoria, la ciudad natal del técnico madridista no cambia mucho las cosas para él.
"Vuelvo a mi ciudad pero los sentimentalismos no me cambian mucho. Tengo amigos y familia, pero hay que estar centrados en el trabajo. Hace 40 años cuando empecé a jugar nadie podía siquiera soñar con albergar algo así. Es un orgullo", comentó.
El objetivo de la Final Four se ha conseguido pero en el Madrid lo que cuentan son los títulos.
"Para mi tiene mucho valor llegar a la Final Four porque sé lo que cuesta. La trayectoria de los últimos años es magnífica. La ambición de un equipo debe ser llegar a estas situaciones. La gente valora en el tiempo lo que este equipo consigue por la trayectoria. Hay mucha gente detrás que trabaja mucho por conseguir retos como éste. Valoro mucho el camino", resaltó.
Se ven las caras otra vez con el CSKA
El CSKA, igual que el año pasado, es el primer y complicado escollo.
"Cuando hablas de la Euroliga es complicado decir qué partido no es difícil. Este año hemos perdido los dos partidos contra el CSKA, aunque los dos estuvimos cerca de ganarlos. Tienen a Chacho, De Colo y Higgins, que son muy buenos en el uno contra uno. Son muy físicos y juegan a un ritmo muy alto. Tenemos por ellos un gran respeto", declaró.
Walter Tavares ha tenido problemas en todos los enfrentamientos contra el equipo ruso.
"Tienen calidad para tapar a Tavares, pero siempre pongo el ejemplo de la manta y cuando te tapas el cuello igual se te quedan los pies helados. Si consigues que la manta sea más grande algo tienes ganado", explicó Laso.
Respecto a la otra semifinal, Laso fue pragmático.
"Fenerbahce y Efes me preocupan cero. El Efes tiene un equipazo y el Fenerbahce tiene jugadores determinantes. Vamos a ver si es verdad que llegan con tantas bajas como dicen. La Final Four está muy abierta y es difícil hablar de favoritismo", apuntó.
La Final Four en Vitoria
El hecho de jugar en Vitoria, tampoco le da más ventajas al Madrid según su entrenador.
"En las Final Four jugar en casa te da muy poca ventaja; no jugamos en Madrid, jugamos en Vitoria. Hay mucha igualdad y los equipos están muy acostumbrados a jugar en estas circunstancias", observó.
Respecto a la motivación de los jugadores, Laso fue muy gráfico en su comentario.
"Normal que un jugador tenga ganas de jugar en estas citas y que piense en hacerlo lo mejor posible. No necesito meterle una guindilla en el culo a Campazzo, ni a nadie, para que juegue mejor. Lo llevan haciendo durante todo el año. Por otra parte hay que controlar ese extra de motivación que pueden tener. Tampoco es un partido más, es una Final a Cuatro. Hay que ayudarles a encauzar esa motivación", subrayó.
Respecto a si sólo vale ganar, el entrenador del Real Madrid explicó su punto de vista.
"Con mi manera de ser ni me hundo cuando perdemos, ni ahora les veo en el mejor momento del año. Lo que si estoy contento es que el equipo ha sido capaz de trabajar para seguir creciendo. Está claro que el lunes quiero estar aquí siendo campeón de Europa, pero antes hubo que eliminar al Panathinaikos y entrar en el playoff. Hicimos un trabajo previo para poder ganar ese partido", apuntó.
Al técnico se le pidió que completara la siguiente frase: Ganar dos títulos seguidos sería... "La leche", finalizó Pablo Laso.
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