El CSKA acabó con el sueño de La Undécima del Real Madrid. Los de Pablo Laso estuvieron todo el partido por encima de los rusos en el marcador, pero la acumulación de faltas y la lucidez de Sergio Rodríguez y Nando De Colo cuando peor estaba su equipo acabaron con el conjunto blanco. Los bases de Dimitrios Itoudis fueron determinantes y dirigieron a su equipo hacia la victoria.

'El Chacho' fue el mejor del encuentro. En general, nunca se la había dado del todo bien jugar contra el Real Madrid y llegaba a la Final Four tocado después de sufrir una esguince de tobillo. Eso no le impidió echarse al CSKA sobre sus hombros, cuajando un sobresaliente partido con 23 puntos y 4 asistencias. Su aportación en el primer cuarto fue vital cuando su equipo estaba 11 abajo frente a un Tavares imparable.

De Colo, por su parte, fue decisivo y el mejor complice de Sergio Rodríguez. La victoria del CSKA no se entendería sin su aparición en los minutos finales. Sin cuajar un gran partido, el base francés demostró por qué toda Europa, incluido el Real Madrid, le quiere. Sumó 23 puntos, pero 14 de ellos fueron desde la línea de tiro libre. Este fue el recurso con el que los rusos se mantuvieron en el partido y se fueron acercando en el marcador sin hacer mucho ruido. Punto a punto. Así 42 veces. Itoudis, esta vez, no habló.

'El Chacho' se toma la revancha

El CSKA se tomó su particular venganza de la pasada temporada bajo la batuta de Sergio Rodríguez y De Colo. La actitud de 'El Chacho' daba un impulso a los suyos cuando parecían hundidos. Les alentaba una y otra vez, buscando que se involucraran. Era un líder. Iba sobrado de motivación y, por si acaso, lideró a su equipo en el juego. 'El Chacho' era el que más ganas tenía de ganar ese partido. Por volver a una final de la Euroliga, pero también por tomarse su revancha con algunos de los algún día fueron sus compañeros y el año pasado fueron sus verdugos.

De Colo, un sueldo prohibitivo

'El Chacho' hizo valer la ley del ex y De Colo deja al Madrid con los dientes largos. El francés es el gran sueño del club blanco para la próxima temporada. También de un sinfín de equipos europeos. Termina contrato con el CSKA y, por ahora, se mantiene abierto a escuchar propuestas. El Madrid, sin embargo, sabe que hay una barrera que hace que sea un sueño imposible: cobra tres millones limpios por temporada.

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