El 16 de marzo de 1980 nacía en Córdoba Felipe Reyes. La madre de 'Felipón' continuaba el guión seguido con sus anteriores retoños y viajaba a la ciudad andaluza para que su cuarto y último hijo tuviera esencia del sur. Hoy, 40 años después, el jugador del Real Madrid celebra un cumpleaños atípico. En cuarentena por el COVID-19, tras dar positivo su hermano Alfonso, y con su futuro en el aire, la celebración por el aniversario de Felipe tendrá que esperar.
Nada más y nada menos que 15 cumpleaños ha celebrado Felipe Reyes vistiendo la camiseta del Real Madrid. Desde que llegara en 2004, el pequeño de los Reyes siempre ha ocupado un hueco especial en el corazón de la afición blanca. Una hinchada que ha cantando más alirones que veces el cumpleaños feliz junto al ex de Estudiantes.
Felipe renace
Esta campaña 2019/20 se antojaba como la última del jugador cordobés al máximo nivel y, después de un inicio marcado por las lesiones, su papel como 'cinco' iba a volver a florecer.
Laso, obligado por las lesiones y guiado por su fe en el capitán, volvía a situar a Felipe bajo la sombra del tablero. Como si de un clásico de cine se tratara, Reyes hacía desaparecer la morriña de sus fieles, al mismo ritmo que reboteaba y bailaba en la pintura como en sus mejores años. Junto a su joven 'padawan' Garuba, el amor entre Felipe y el rebote renacía antes de que se marchase el invierno del 2020.
El notable rendimiento del capitán hacia presagiar un desenlace idílico para la que puede ser la última temporada de Felipe como jugador merengue. Pese a que acaba contrato en junio, el futuro de cordobés no ocupaba espacio en su día a día cuando el coronavirus lo cambió todo.
El rebote, en cuarentena
El 40 cumpleaños de Felipe se antojaba feliz y plácido a comienzos de año, pero todo dio un giro cuando el Covid-19 entró en escena. El partido a puerta cerrada en Milán, una de las ciudades más afectadas por este virus, dejaba marca en el Real Madrid y es que el positivo de Trey Thompkins cambiaba todos los guiones de la sección en particular y del club en general.
Hace menos de una semana que el Real Madrid al completo inició la cuarentena. Un parón que saltó del club a la competición y que golpeó a la familia Reyes cuando Alfonso, hermano mayor de Felipe, confirmó su positivo en coronavirus.
El actual presidente de la ABP (Asociación de Baloncestistas Profesionales) informaba a través de Twitter que sufría el COVID-19 y sospecha a su vez que contrajo el virus después de haber estado en contacto con su hermano. Felipe, que de momento se encuentra asintomático, estuvo con Alfonso después de viajar a la ciudad de Il Duomo, uno de los focos de la enfermedad, para verse las caras con el Olimpia Milan.
Futuro en el aire
La situación que vive el baloncesto actual, debido a la pandemia que nos azota, ha puesto en cuarentena también el futuro de Felipe Reyes. El capitán del conjunto blanco acaba contrato en junio y su continuidad en el Real Madrid estaba completamente en el aire, y lo está más aún ahora tras la incertidumbre que golpea al deporte.
El panorama de Felipe, que nunca quiso cerrar la puerta a superar el récord de longevidad que ostenta Joan Chichi Creus, retirado a los 42 años de edad, ha dado un giro de 180 grados por la situación actual. Que un jugador de 40 años esté parado más de un mes, añadiendo las lesiones que ha sufrido esta temporada, puede significar el fin de su carrera.
Una vez calmada la tempestad vírica, la incertidumbre sobre la continuidad o no del eterno capitán blanco se irá despejando. Club y jugador se sentarán a hablar, nunca ha habido problema alguno en estas reuniones, y sabremos si Felipe colgará la camiseta blanca antes de cumplir los 41 o si continuará vistiendo los colores del Real Madrid doce meses más.
Sea cual fuere el desenlace de esta historia, Felipe Reyes celebra su 40 cumpleaños de una manera inusitada que jamás podrá olvidar. Un aniversario que puede ser el último que celebre como miembro de la plantilla del Real Madrid.
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