Un Musa excelso lidera al Real Madrid frente a Valencia Basket y certifica la octava victoria seguida
El escolta bosnio demostró una tarde más que sigue de dulce y terminó el choque con 22 puntos y sin ningún fallo en sus seis lanzamientos de tres.
4 diciembre, 2022 20:02Dzanan Musa sigue de dulce. El jugador bosnio fichado por el Real Madrid este verano procedente del Río Breogan se ha convertido en el líder del equipo que entrena Chus Mateo. De sus manos ha nacido el octavo triunfo seguido del conjunto blanco que este domingo ha arrollado a todo un Valencia Basket que no ha podido oponer resistencia. [Narración y estadísticas: Real Madrid 79-62 Valencia Basket].
El conjunto blanco supo regular fuerzas y asestar golpes definitivos en los momentos en los que tenía que hacerlo. Bajo la ejecución de un Dzanan Musas en modo MVP, galardón que consiguió la temporada pasada en Liga Endesa defendiendo los colores del cuadro gallego, el Real Madrid sacó el máximo partido posible a la regla no escrita de los cuartos impares. Volar en el primero y en el tercero y sestear antes del descanso y también antes del final.
Los blancos arrancaron el choque con un parcial de 17-2 que marcó de manera clara y definitiva el sino del encuentro. Musa y Tavares, como ya sucedió en el triunfo de Euroliga de este viernes frente a Fenerbahçe, se pusieron al frente de la orquesta blanca para tocar la mejor de las sinfonías. Poco a poco, el equipo de Chus Mateo va acallando las críticas del principio de la temporada añadiendo un juego de altos vuelos a sus buenos resultados.
En el segundo cuarto, el partido se apretó ya que la subida del nivel defensivo de Valencia Basket provocó que la renta decreciera hasta situarse alrededor de los cinco puntos. Sin embargo, Musa volvió a sacar su varita para inventar y su fusil para ajusticiar desde más allá del arco y estiró de nuevo la ventaja del Real Madrid en el tercer cuarto. El bosnio terminó con 22 puntos y un inmaculado 6 de 6 en triples. Números que tuvieron una repercusión total en el juego y en el resultado para poner el lazo a la octava victoria seguida de un Real Madrid que sigue a velocidad de crucero. Las aportaciones de jugadores como Mario Hezonja (10 puntos y 4 rebotes) o Gaby Deck (6 puntos, 8 rebotes y 5 asistencias) también fueron claves.
Suena la orquesta blanca
Hace algo menos de un mes que el Real Madrid perdió su último partido. Fue el 6 de noviembre en un incomprensible accidente frente a Casademont Zaragoza. Desde entonces, siete han sido las víctimas del cuadro de Chus Mateo que empieza a engrasar su maquinaria y que vuelve a ser uno de los conjuntos más temidos de Europa. Anadolu Efes, Alba Berlín, UCAM Murcia, Valencia Basket, Partizan, Betis, Fenerbahçe y de nuevo Valencia Basket conforman la lista de víctimas.
Este domingo, los blancos volvieron a sacar esa séptima marcha que ha desarrollado su juego en ataque y lucieron las mejores virtudes de su defensa, especialmente en un arranque de primer cuarto que enloqueció al WiZink Center. Con Nigel Williams-Goss asentado en la dirección de juego y con el versátil trío que forman Deck, Cornelie y Tavares en la pintura, los blancos arrollaron al equipo de Alex Mumbrú. Por fuera, Musa ejecutaba a ritmo de vértigo.
El encuentro empezó a decantarse con un parcial de 7-2 a favor de los locales con el que abrieron el marcador en las primeras acciones. Goss ejercía de director de orquesta y Musa empezaba a notar el picorcito de las grandes tardes. El bosnio dio continuidad al buen arranque con un tres de tres en triples que elevó ese hueco abierto hasta el 17-2. Una diferencia que supuso una losa casi insuperable para los taronja.
El equipo de Mumbrú respondió con un 0-5 a su favor que sirvió para maquillar mínimamente el marcador del primer acto. Sin embargo, el choque tenía una tendencia marcada que permitió a Chus introducir variantes muy rápido para repartir minutos y ganar piernas frescas en pista. Los blancos, para evitar una recuperación de su rival, endurecieron su defensa con la salida de Alberto Abalde y de Ndiaye, finalizando el primer cuarto con un resultado de 19-7.
El rapapolvo de Mumbrú en los dos minutos de descanso fue considerable y surtió efecto. Valencia arrancó el segundo acto con un parcial de 0-7 que venía a confirmar la pájara blanca. Uno de los retos de Chus Mateo es intentar minimizar estos bajones puntuales que suele tener el equipo, especialmente en los segundos cuartos. La marcha de Tavares y la unión en pista de Poirier y Ndiaye provocó que Valencia Basket ganara más protagonismo en la zona.
Además, consiguieron bajar un par de velocidades a su juego para hacerlo más seguro y consiguieron hacer daño a la defensa del Real Madrid que había funcionado a la perfección en el primer acto. No obstante, los blancos aceptaron el reto y con Llull a los mandos ejercieron un juego en ataque mucho más posicional y estático, aprovechando la diferencia de talento en los duelos individuales y acudiendo menos a los sistemas efectivos para el juego exterior. El de Mahón, con un 2+1 espectacular tras una bandeja inverosímil, cortaba la racha taronja (22-14, min. 14).
Después del primer arreón de los valecianos con un gran Webb y con un Prepelic que seguía buscando su momento en el partido, el Real Madrid supo recuperar el tempo adecuado con un Llull que le dio tranquilidad al equipo en la gestión de sus posesiones. Aunque perdieron amenazas en el juego exterior, el regreso de Tavares permitió crecer a los blancos en la pintura y también en defensa. El caboverdiano terminó con tres tapones.
Sin embargo, la acumulación de minutos de la 'Torre de Maio' permitió a Valencia volver a recuperar vuelo ofensivo hasta reducir la desventaja alrededor de los cinco puntos cuando se acercaba el descanso. Tanto es así que los taronja se llevaron el segundo acto por un parcial de 13-20, dejando un marcador final de la primera parte de 32-27.
La explosión de Musa
La segunda parte, y en concreto el tercer cuarto, comenzó como lo había hecho el propio partido. El Real Madrid culminó la segunda parte de aquel viejo plan de los cuartos impares y volvió a exhibir su mejor versión. Musa se puso al frente, otra vez con otros tres triples sin fallo, para poner contra las cuerdas a un Valencia Basket que se había dejado toda sus fuerzas remando a contracorriente antes del descanso.
En poco más de cinco minutos, la diferencia volvió a crecer hasta los 14 puntos (48-34) gracias una mejor circulación exterior y a un juego mucho más dinámico y agresivo. Los blancos habían vuelto a echar el resto en defensa y estaban demostrando ser capaces de juegar a dos ritmos, el mostrado en el primer y el tercer acto, y uno más ralentizado, el que dirigió Llull entremedias. Si algo ha aprendido a ser el Madrid de Chus Mateo es a ser un ejemplo de versatilidad más que de brillantez.
Musa tomó la responsabilidad en ataque, en compañía también de Mario Hezonja y Gaby Deck, y Walter Tavares lo hizo en defensa. A medida que avanza la temporada, Tavares ofrece una mejor versión de sí mismo después de haber iniciado el curso, sin contar la Supercopa, falto de chispa. Aunque los de Mumbrú sufrieron el golpe, Valencia Basket no se dejó ir y empezó a crecer al final del tercer acto con buenas acciones de Harper al poste. Sin embargo, el parcial endosado de 26-16 hacía presagiar una conclusión de partido tranquila para los blancos.
Y así fue. A Valencia Basket ya no le quedaban más fuerzas para pelear después de haber tenido una batalla titánica en Euroliga ante Partizan y el 'Chacho' Rodríguez y Fabien Causeur supieron contemporizar y marcar la pauta desde un juego más pausado, utilizando mejor que nunca los bloqueos en la cabecera para crear y para llegar hasta el aro de los valencianos. Los puntos del base y también de Poirier pusieron la guinda a la octava victoria consecutiva de los blancos para seguir segundos en Liga a la estela de Lenovo Tenerife.
Real Madrid 79-62
Real Madrid: Williams-Goss (2), Musa (22), Deck (6), Cornelie (5), Tavares (9) -cinco titular- Causeur (4), Abalde (2), Hezonja (10), Sergio Rodríguez (8), Poirier (8), Ndiaye (-) y Llull (3).
Valencia Basket: Harper (10), López-Arostegui (2), Claver (-), Webb III (14), Dubljevic (2) -cinco titular- Ferrando (3), Puerto (2), Prepelic (8), Pradilla (6), Radebaugh (8), Alexander (7) y Marí (-).
Parciales: 19-7 | 13-20 | 26-16 | 21-19
Árbitros: Hierrezuelo, Castillo y Sánchez. Eliminaron al visitante Alexander (m.38).
Incidencias: partido correspondiente a la 10 jornada de la fase regular de la Liga Endesa disputado en WiZink Center de Madrid ante 8.133 espectadores. Antes del comienzo del encuentro se guardó un minuto de silencio por el Miguel Ángel Martín, histórico entrenador del Estudiantes y también del Real Madrid o del Granada.