Si había alguien que se jugara algo en este encuentro, ese era el Baskonia. Los vascos necesitaban tan sólo una última victoria en este tramo regular de la Euroliga para certificar su presencia al menos en el 'play-in', así que lograron su objetivo en uno de los escenarios más complicados. Los de Ivanovic se repusieron a un mal inicio y vencieron a un Real Madrid que tenía los deberes hechos en un choque con emoción hasta el final. [Así vivimos la victora del Baskonia ante el Real Madrid]
El Real Madrid borró del mapa a su rival en el arranque del partido. Los blancos no encontraron apenas oposición y llegaron a estar la friolera de 15 puntos arriba en los primeros minutos, síntoma de que la diferencia que reflejaba la clasificación se trasladaba a pies juntillas a la cancha.
Una pequeña reacción de los vascos les permitió marcharse 'sólo' 10 puntos abajo al término del primer cuarto (27-17), pero al conjunto de Dusko Ivanovic le costó mucho carburar en toda la primera parte. Desboradados por Hezonja y Causeur, tan sólo la actuación de Markus Howard, que terminó los 20 minutos iniciales con 11 puntos, sirvió para que el Baskonia pudiera sobrevivir y marcharse al descanso con una desventaja remontable (48-42).
El paso por los vestuarios le sentó muy bien a los visitantes. Las órdenes de Ivanovic surtieron efecto y la diferencia siguió menguando. Tanto, que el Baskonia se puso por delante por primera vez en el partido cuanto faltaban dos minutos para el final del tercer cuarto (58-60).
La batalla no tuvo tregua hasta el último segundo. Las mínimas rentas con las que se movió el Baskonia en el tramo final siempre dieron una esperanza al Real Madrid, que aunque ya no tenía en juego nada más que el orgullo dio la talla hasta el final.
Buen arranque blanco
Era el penúltimo partido de la fase regular y los dos equipos llegaban con necesidades muy diferentes. De hecho, el Real Madrid tan sólo tenía la motivación de seguir ganando confianza antes de los cruces, porque el primer puesto hacía ya tiempo que lo tenía asegurado. El Baskonia, sin embargo, se jugaba la vida.
No lo pareció viendo cómo entró a la cancha el equipo de Ivanovic. El arranque fue desastroso y el Real Madrid campó a sus anchas por el parqué, especialmente Caseur y Hezonja, que se encargaron de abrir una renta que llegó a los 15 puntos. Tan sólo un 0-5 de parcial por parte de los vascos, que se estiró hasta el 0-8 después, permitió cerrar el primer cuarto con un 27-17 esclarecedor.
Volvió a despegarse el Real Madrid en los albores del segundo acto, pero entre Tadas Sedekerskis y Howard remolcaron a los suyos. De hecho el plantel vasco llegó a situarse a tres puntos. Ahí apretó de nuevo el equipo de Chus Mateo, que no hizo más daño porque Howard apareció de nuevo providencial con cinco puntos salvadores antes del descanso (48-42, min.20).
Era el día del estadounidense. Tras el paso por los vestuarios su figura siguió haciéndose cada vez más grande, y con tres triples suyos llegó la primera ventaja en todo el partido para el equipo visitante. Un 58-60 a falta de dos minutos para el final del tercer cuarto que hacía entrar al partido en otra dimensión bien distinta.
Aquella reacción del Baskonia dio paso a un último cuarto emocionante. Comenzó con mejores sensaciones el Real Madrid gracias a Dzanan Musa, pero un parcial de 0-13 con Howard y Costello como protagonistas rompió la contienda y pareció ponerle la alfombra roja al Baskonia.
El Real Madrid, sin embargo, tiró de orgullo y no se fue del partido hasta el último instante. Aún así, los vascos supieron jugar con la escasa renta que tenían y terminaron asaltando el WiZink en una noche mágica para ellos.
Real Madrid 91 - 95 Baskonia
Real Madrid: Campazzo (12), Causeur (13), Hezonja (18), Yabusele (12), Tavares (6), -cinco inicial-, Poirier (9), Deck (5) Llull (-), Musa (16), Sergio Rodríguez (-).
Baskonia: Miller-Mcintyre (4), Kotsar (4), Díez (5), Marinkovic (3), Moneke (11) -cinco titular-, Sedekerskis (9), Howard (35), Costello (19), Rogkavopoulos (5), Chiozza (-).
Árbitros: Mehdi Difallah (Francia), Tomislav Hordov (Croacia) y Saulius Racys (Suecia). Excluyeron por cinco faltas a Tavares (min.39).
Incidencias: partido de la jornada 33 de la Euroliga disputado en el WiZink Center ante 9.484 espectadores.