El Real Madrid y el Sevilla se medían en la final de LaLiga Promises. No obstante, el partido tuvo cierta esencia especial. Antes de que el balón echara a rodar, el capitán del conjunto sevillano, Mazo, hizo entrega a Reyes, jugador blanco, de una camiseta del club andaluz con el número 10 de su padre, José Antonio Reyes. 

Fue un momento muy emotivo que provocó el aplauso de todos los presentes. El encuentro tuvo un único protagonista quien, posteriormente, recibió el MVP y la bota de oro del torneo: José Reyes. Sus cuatro goles condujeron al Real Madrid a la reválida de su título de campeón del torneo LaLiga Promises de fútbol al vencer por 5-3 en la final disputada en Abu Dabi.

El canterano madridista dio la vuelta a la final cuando el Real Madrid perdía 2-0 en el luminoso. Todo un logro por el que obtuvo su recompensa. Nueve goles ha anotado el reciente fichaje del conjunto blanco en los encuentros disputados en el torneo. 

Con este nuevo título, el octavo, el Real Madrid rompe el empate a siete que tenía con el FC Barcelona para situarse en solitario al frente del historial del torneo, que empezó en 1996 con categoría alevín y desde 2011 se disputa en la infantil.

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