Zinedine Zidane no ha querido aumentar la bola de la polémica que formaron Gerard Piqué y Fernando Roig tras criticar la actuación arbitral del encuentro entre el Villarreal y el Real Madrid. El entrenador francés ha recalcado que ni él, ni sus jugadores se centran en los árbitros y sólo piensan en seguir trabajando. Algo muy distinto a lo que se estila en la Ciudad Condal.
Estoy orgulloso de mis jugadores porque respetan a los árbitros
Zidane ha defendido así a su plantilla por su correcta actuación. Un dardo para el central del Barcelona y el presidente del Villarreal, con el que dijo no estar de acuerdo tras sus declaraciones. No es la primera vez que el entrenador del Real Madrid da la cara por sus jugadores, muestra de la unión entre el técnico y la plantilla: "Estoy a muerte con ellos", añadió Zidane en la rueda de prensa.