No hay por qué cambiar lo que funciona. Ese debe de ser el pensamiento de Florentino Pérez que desde que llegó a la presidencia del Real Madrid en el año 2000, siempre brinda a sus aficionados el fichaje de un galáctico en año de elecciones, algo que se vivirá dentro de unos meses haya comicios o no.
El mandatario blanco estrenó su cargo arrebatando a Luis Figo del Barcelona, donde era el capitán. En 2004 apostó por Michael Owen, todo un Balón de Oro y un consumado goleador. Tras abandonar la presidencia en 2006 volvió en 2009 para abrir la caja de Pandora, año en el que fichó a Cristiano Ronaldo, Kaka, Karim Benzema y Xabi Alonso. Y en 2013 llegó el último gran crack hasta el momento, Gareth Bale.
Está por ver si en 2017 Florentino continuará con la costumbre pero viendo los antecedentes, los aficionados del Madrid puede soñar libremente con nombres como Hazard, Dybala o Griezmann.