Cuando Marco Asensio se incorporó a las órdenes de Zidane el pasado verano, pocos se esperaban la temporada que avecinaba para el mallorquín y, menos aún, el nivel que daría partido tras partido. Y tras un estreno por todo lo alto, le ha llegado su recompensa en forma de revisión de su contrato y la renovación hasta 2023. Motivos no faltan para que sea merecedor de este premio.

ENTRADA POR LA PUERTA GRANDE

La afición, el club y sus propios compañeros han quedado boquiabiertos al ver de lo que es capaz Asensio con tan solo 21 años y su naturalidad para expresarlo sobre el campo en su primera temporada en el Real Madrid. Ya en su estreno de corto en la Supercopa de Europa marcó un golazo que abrió el marcador. Fue su carta de presentación de lo que estaba por venir.

DECISIÓN Y LIDERAZGO

Su juventud no le impide ejercer casi de líder sobre el césped. No se amilana ante ningún rival y es un jugador capaz de echarse el equipo a las espaldas si este lo necesita. Ha sido crucial en choques determinantes como lo fue en la prórroga de cuartos de final de la Champions ante el Bayern en el Bernabéu.

EJEMPLO DE PROFESIONALIDAD

No toda la temporada ha sido un camino de rosas para Asensio ya que, durante meses, estuvo enclaustrado en el banquillo o incluso en la grada. Pero, a diferencia de algunos de sus compañeros de profesión, no abrió la boca y se limitó a trabajar día tras día hasta que se forjó sus propias oportunidades.

BLINDAR A LA ESTRELLA DEL FUTURO

El Real Madrid no permitirá la salida de Marco Asensio. Es un jugador llamado a liderar este deporte dentro de unos años. Pocos tienen una progresión por delante como él y se da por seguro que será muy importante en el Madrid dentro de unos años. Para tapar cualquier fuga, su cláusula ha aumentado hasta los 350 'kilos' y ganará 3,5 millones netos. Asensio ha dejado de ser un novato a ser una de las figuras del Madrid.

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