Cristiano Ronaldo volvió a brillar como de costumbre en el duelo entre Rusia y Portugal. A pesar de que su futuro en el Real Madrid sea a día de hoy una incógnita, el crack portugués quiere estar totalmente concentrado en llevar a su país hacia la victoria. Por mucho que en estos últimos días se le haya visto con rostro serio, antes de que empezara el partido, su cara cambió por completo.
El luso salió al campo acompañado por una niña en silla de ruedas, que no paraba de sonreír tímidamente mirando al jugador. Instantes antes de que diera comienzo el encuentro, Cristiano se quitó la sudadera y se la entregó a la pequeña dándole un beso. Un emotivo gesto que define la grandeza del delantero tanto dentro como fuera del terreno de juego y que demuestra ese lado oculto y tierno que pocos conocen.
Martin Liberman desvela la otra cara de Cristiano Ronaldo by footbie.com