El partido contra la MLS fue la última prueba del Real Madrid de Zidane antes de afrontar la Supercopa de Europa ante el United. El encuentro fue un festival del despliegue ofensivo del club blanco -pese a que no estuvieron acertados de cara al gol- y ensombreció la actuación de un jugador en defensa que se encargó de enterrar la gran mayoría de las ocasiones rivales.

Se trata de Jesús Vallejo, El aragonés sigue pasito a pasito con su adaptación a su nuevo equipo pero en Chicago dejó muestras muy claras de lo que puede a llegar a ser. Tiró de galones en defensa y, con un desparpajo inusual, torpedeó una y otra vez las intentonas rivales. Ya en sus dos primeros partidos con el Madrid se le vio atrevido, pero no tanto como ante la MLS.

DESPARPAJO Y FIABILIDAD

En la segunda parte, cuando Vallejo saltó al campo, la MLS se centró en buscar la espalda de los defensores blancos. Los balones largos se sucedía uno tras otro pero Vallejo siempre estaba ahí ya fuera en carrera o deslizándose sobre el suelo para interceptar el balón. Por si fuera poco, se atrevió con la salida de balón rodado en un par de ocasiones e incluso llegó a pisar la frontal del área rival. Ese es el Vallejo que tanto destacó en la Bundesliga y la razón por la que Zidane le quiere en su equipo. El único 'pero' de su partido podría ser que le vio en alguna jugada con demasiado ímpetu descuidando su espalda, nada que no se pueda corregir a base de entrenamiento.

HA ACEPTADO SU ROL EN EL EQUIPO

Con una juventud abrumadora, el propio Vallejo sabe que tendrá que esperar para su momento. Por delante suya están Ramos, Varane y Nacho. Ha aceptado su rol en el equipo y saben que más pronto que tarde las oportunidades irán llegando. Como si de un veterano se tratara, acudió a zona mixta y se mostró autocrítico: "Los nuevos tenemos que adptarnos", sentenció el joven zaguero. El Soldier Field disfrutó de la verdadera presentación de Vallejo, un central para la próxima década.

Borja Mayoral, MVP del partido by footbie.com