El Real Madrid debuta este miércoles en la Champions League. El conjunto blanco se enfrenta al APOEL en el primer encuentro de camino a la final de Kiev. Sin embargo, si el cuadro merengue quiere repetir el éxito de la temporada pasada, deberá mejorar varios aspectos respecto a lo realizado en la edición del curso pasado.

NO FALLAR EN LA FASE DE GRUPOS

El Madrid no tiene una fase de grupos sencilla. El Borussia Dortmund y el Tottenham se presentan como duros rivales a batir para conseguir la primera plaza del grupo. Sin embargo, Zidane y su equipo ya tienen la experiencia del año pasado para saber que no deben fallar. El curso pasado fueron segundos de grupo, lo que les hizo enfrentarse a un rival tan duro en octavos como el Nápoles.

ECHAR EL CERROJO A LA PORTERÍA

El cuadro de Chamartín no ha comenzado muy bien la temporada en lo que a goles recibidos se refiere. Este problema ya lo arrastran de la temporada pasada. En la pasada edición de la máxima competición europea, el Madrid solo consiguió dejar la portería a cero en un solo partido, en la ida de las semifinales ante el Atlético de Madrid. Keylor y la defensa tienen tarea por delante para revertir esta situación.

TENER CUIDADO CON EL DORTMUND

El Real Madrid se volverá a ver las caras con el Borussia Dortmund este año. El conjunto alemán ya fue un quebradero de cabeza para los de Zidane el curso pasado, por lo que los madridistas ya tienen la lección aprendida para esta campaña. 2-2 fue el marcador final tanto en Alemania como en el Santiago Bernabéu, cuatro puntos perdidos que fueron claves para no ser primeros de grupos.

NO FIARSE DE LOS EQUIPOS PEQUEÑOS

El APOEL es el primer rival de la fase de grupos. El equipo chipriota es, a priori, la cenicienta del grupo. Sin embargo, el Madrid no debe fiarse. La experiencia del año pasado demostró que no deben fiarse de ningún equipo. El Legia de Varsovia ya consiguió empatar a tres en Polonia, un resultado que nadie esperaba.

Zidane: "Puede que nos falte un '9', pero no se pudo traer a otro" by footbie.com