El partido que midió al Real Madrid con la Real Sociedad en Anoeta dejó una fea y curiosa imagen. Cada vez que Keylor Navas tocaba el balón, el estadio entero profería una sonora pitada. Esto se debe a que en 2015, una jugada entre el portero costarricense y Agirretxe terminó con la lesión de este último.
El delantero de 30 años pasó un largo calvario, y de hecho fue ante el Real Madrid en este último partido el tercero que juega esta temporada en La Liga. Admitió, eso sí, que el club blanco le mandó cartas de apoyo durante todo el proceso de recuperación. Pero nunca una llamada de Navas.
Al finalizar el encuentro, Keylor fue informado de ello, y declaró: "No sabía que Agirretxe estuvo tanto tiempo lesionado, quizá fue un error mío no haberle llamado antes. Nunca he tenido ningún problema con Agirretxe".
El portero también habló sobre la inconformidad del Madrid con el empate: "Este equipo nunca sale pensando que un empate puede ser un buen resultado, salimos a ganar en todos los campos". Finalmente, se alegró del partido de Bale: "Su gol es fruto del trabajo, se lo merece".
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