Este verano, tras una complicada temporada, James Rodríguez decidía salir del Real Madrid. El destino del colombiano no estaba claro, sin embargo, Carlo Ancelotti insistió al Bayern Múnich para que entrara en la puja y, finalmente, consiguió su fichaje. El cafetero se marcha cedido al cuadro alemán para este curso y el que viene, con una opción de compra para la siguiente.

El italiano, su gran valedor, conseguía así su gran objetivo, reencontrarse con James. Sin embargo, la situación se ha complicado para el exmadridista. El despido de Ancelotti es un 'palo' para el futbolista. El técnico era el gran pilar en el que se asentaba su fichaje, y sin su presencia su papel en el equipo, en el que tendrá que estar hasta junio de 2019, será ahora una incógnita.

NO HA RECUPERADO SU MEJOR NIVEL

Desde su llegada a Múnich, James no ha conseguido recuperar su mejor nivel. El colombiano aunque contaba con la confianza total de Ancelotti, pero no ha respondido sobre el campo. En el único partido en el que ha brillado hasta ahora ha sido ante el Schalke 04. Marcó un gol y dio una asistencia que le hicieron ser el mejor jugador de la jornada de la Bundesliga.

En el resto de partidos, no ha dado motivos para justificar su fichaje. Nunca ha llegado a ser indiscutible, de hecho solo ha sido titular en tres partidos de los cinco que ha jugado hasta el momento. Se perdió los cuatro partidos de agosto por lesión, ante el Mainz no jugó y contra el Wolfsburgo solo disputó cinco minutos, lo que da muestras del mal momento del colombiano.

FRACASO ANTE EL PSG

Su gran prueba de fuego se producía este miércoles ante el PSG. Sin embargo, una vez más, fracasó. Partía como titular ante los galos, pero no le pudo ir peor, y no solo por la derrota por 3-0. En lo personal, solo jugó 45 minutos, dando una imagen pésima y dejando su lugar a Coman. El cafetero perdió su primera gran oportunidad y el panorama que se le presenta plantea muchas dudas.

James cantando en la concentración del Bayern Munich by footbie.com