La sede de la final de la Copa del Rey siempre conlleva un debate tan polémico como inerte por la mala gestión que hace la RFEF de su competición. A pesar de las presiones que está sufriendo el Real Madrid en las últimas horas desde la prensa catalana y las declaraciones ambiguas e intencionadas de Juan Luis Larrea, el club blanco tiene claro que Barcelona y Sevilla no disputará el encuentro por el título en el Estadio Santiago Bernabéu. La principal razón es que Florentino Pérez cumplirá con el expreso deseo de los socios madridistas que no quieren que el eterno rival pise el coliseo merengue y muchos menos que sea el posible escenario de los pitos al himno por una gran parte de la afición culé. Adicionalmente todavía permanece en la memoria del máximo mandatario la negativa del Barcelona a ceder el Camp Nou en la final ante el Zaragoza de 2004. 

ANTIVIOLENCIA IMPEDIRÍA DOS PARTIDOS DE ALTO RIESGO EN MADRID

Además de este principal motivo, tanto la RFEF como la prensa probarcelonista se quedará sin coartada por un motivo de seguridad. Y es que la final de Copa del Rey está programada para el 21 de abril, fin de semana coincidente con la jornada 34 de La Liga. El Real Madrid tendrá que aplazar su duelo ante el Sevilla porque el conjunto andaluz es uno de los finalistas y ya que el Santiago Bernabéu estará libre ha sido utilizado para realizar una campaña de acoso contra la entidad blanca. Sin embargo, no existe opción alguna de que el estadio madrileño albergue dicho partido. La causa es que, de ser designado, en esas mismas fechas se disputaría el Atlético - Betis en el Wanda Metropolitano. Por lo tanto la capital de España sería una peligrosa ratonera con dos encuentros de alto riesgo y con posibles enfrentamientos entre las aficiones de los dos equipos sevillanos, así como la de los azulgranas con la de los colchoneros y la de los propios merengues. Esta circunstancia jamás sería aprobada por la Comisión Antiviolencia por el gran peligro existente. 

EL WANDA METROPOLITANO O MESTALLA, LAS OPCIONES

Por tanto, la única opción de que la final se dispute en Madrid pasa por su celebración en el Wanda Metropolitano y el aplazamiento del Atlético - Betis. La alternativa, que con el paso de las horas coge más fuerza, es la de Mestalla y así no tener que mover más partidos de La Liga en un calendario ya de por sí apretado por la disputa del Mundial de Rusia. Mientras que otros países cuidan al detalle los torneos coperos desde la RFEF se sigue desprestigiando una competición que todos los años por estas fechas toma tintes carnavalescos con el objetivo oculto de atacar siempre al Real Madrid.  

La nieve cubre de blanco el Santiago Bernabéu by footbie.com