En su afán por prohibir todo tipo de relajación, Zinedine Zidane tiene en el pasado una muestra capaz de concienciar a todos los integrantes de su plantilla de la dificultad que entrañará el encuentro de vuelta en el Parque de los Príncipes. El escudo y el margen logrado en la ida son insuficientes en competiciones europeas, donde su mística propicia todo tipo de situaciones inverosímiles. Corría el 1993 cuando un equipo plagado de jugadores experimentados como Butragueño, Buyo, Iván Zamorano o Míchel sucumbía en la capital de Francia en un encuentro que se volvió loco en los minutos finales.

QUINCE MINUTOS PARA EL OLVIDO

Pese a caracterizarse, el Real Madrid, por la épica y su dominio de los instantes decisivos del encuentro, lo sucedido en París aquella noche europea fue algo totalmente disonante con la historia del club blanco. Pese a no tener bajo control el encuentro, el Madrid perdía 1-0 y estaba clasificado cuando el partido entró en ebullición. En el minuto 81, los franceses anotaron el 2-0, en el 87 hicieron el 3-0 y los madridistas parecían desterrados de la Copa de la UEFA.

Contra todo pronóstico, Zamorano consiguió el 3-1 en el 90 y forzaba una prórroga que sabía a gloria para los pupilos de Benito Floro, sin embargo, los franceses obrarían el milagro en la última jugada del encuentro logrando el 4-1 y dejando al Madrid con cara de circunstancia. Algo que, dada la dimensión del rival, de no salir con la concentración e intensidad que requiere la Champions League, podría repetirse y acabaría con la temporada del conjunto blanco en el mes de marzo.

Así se vivió desde dentro de la Grada Fans RMCF la victoria contra el PSG by footbie.com

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