El entrenador del Manchester City ha vuelto a lucir el distintivo amarillo durante el encuentro ante el Stoke. Pese a que esta vez lucía una bufanda echada sobre el hombro, se dejaba ver con total claridad el lazo amarillo con el que el técnico catalán dice rendir homenaje a Jordi Cuixart y Jordi Sánchez, encarcelados por sedición y numerosos delitos anticonstitucionales.

La Federación Inglesa ya sancionó la semana pasada a Guardiola con el pago de 22.500 euros en concepto de sanción por desoír las recomendaciones a que deje de lucir el polémico distintivo. El técnico pareció acatar la decisión, aunque sin compartir la misma. La cabra siempre tira al monte visto lo visto en el último partido.

CAMPO LIBRE PARA LA CHAMPIONS

Sin embargo, Pep Guardiola podrá lucir el lazo amarillo sin ningún tipo de pudor durante los encuentros que su equipo dispute bajo el signo de la UEFA Champions League, y que el máximo organismo europeo de fútbol se lava las manos respecto a este asunto.

El cinismo del técnico ha alcanzado tal cima que ha llegado a equiparar su peculiar reclamación con el distintivo rosa que lucen las víctimas portadores del cáncer de mama e incluso con la amapola que en Reino Unido lucen los equipos ingleses con motivo de la tragedia acaecida durante la I Guerra Mundial.