Tras los incidentes del pasado 11 de marzo donde el presidente del PAOK, Ivan Savvidis, asaltó el campo con una pistola para amenazar al equipo contrario y a los árbitros, la comisión disciplinaria de la liga griega ha decidido sancionarle. El motivo por el que irrumpió en el campo fue porque anularon un gol a su equipo en los minutos de descuento. 

En consecuencia, según France Presse. le se ha suspendido la competición liguera durante tres semanas por los incidentes violentos, lo cual finaliza este sábado. Le han prohibido la entrada a los estadios de fútbol durante los próximos tres años y además le han impuesto una multa de  100.000 euros. Por otro lado, el club no queda exento, debe pagar 63.000 euros y les han quitado tres puntos, por lo que descienden al tercer puesto. El ministro de Deportes, Yorgos Vassiliadis, ha hecho un comunicado con unos acuerdos que deben aceptar los 16 equipos de la Superliga Griega, entre estos términos, los clubes velarán por la seguridad dentro de los estadios ya que la policía solo lo hará en el exterior.

SAVVIDIS SE MUESTRA ARREPENTIDO

"Quiero presentar mis disculpas a los aficionados del PAOK, a todos los aficionados griegos y a toda la comunidad internacional del fútbol. Lamento mucho lo sucedido. Claramente no tenía derecho a ingresar en el campo de juego de esta manera".