Si por algo se caracteriza Marcelo es por su sonrisa. Inseparables allá donde vayan, sea cual sea la situación. La felicidad que transmite al vestuario es fundamental para afrontar los partidos más difíciles con optimismo, de la mejor manera posible. El Bayern Múnich, el último escollo para llegar a la final de Kiev, espera con el cuchillo entre los dientes. Sin embargo, el brasileño no ha variado ni un ápice su forma de ser.

De tal palo tal astilla, dice el refrán. Y así es. Además de por su forma de ser, risueña y extrovertida, Marcelo y Enzo son realmente parecidos en el terreno de juego. El pequeño ya ha dado muestras en Valdebebas de la enorme calidad que atesora, dejando auténticos golazos y anotándolos, incluso, de tres en tres. Todo un killer. 

ASÍ SE DIVIERTEN MARCELO Y SU HIJO

En medio de las semifinales frente al conjunto bávaro Enzo no ha querido perderse el partidazo del Allianz Arena y ha viajado a Múnich para estar cerca de su padre y del Real Madrid, en un momento tan decisivo de la temporada como lo es el duelo entre estos dos colosos del fútbol europeo. Allí, ha sido noticia por el curioso saludo que tiene con su padre. El '12' madridista disfrutó de unos instantes sobre el verde con su pupilo el día previo al choque y dejaron una imagen curiosa.

En primer lugar, se han saludado con un choque de manos particular y, a continuación, Marcelo ha abrazado a su pequeño para demostrarle el enorme cariño que le tiene. Tras unos momentos a solas, el resto de integrantes de la primera plantilla se han ido sumando al rondo de calentamiento. Ahí, el lateral ha vuelto a dedicarle un bonito gesto. Todo sonrisas antes de la final que disputarán esta tarde a las 20:45 horas.