Las diabluras de Wayne Rooney han pasado de ser una constante a algo excepcional que apenas ocurre. Poco queda ya de aquel futbolista que deslumbró al fútbol europeo tras una irrupción meteórica en el Everton y un rendimiento de más a menos en el Manchester United. De ser un delantero letal con una potencia extraordinaria, el inglés ha terminado, en ocasiones, actuando como mediocentro posicional. En su día llegó a sonar como un posible fichaje para el Real Madrid, sin embargo, sus prestaciones se fueron diluyendo paulatinamente hasta estancar su progresión.

Rooney formó una de las mejores parejas ofensivas que han visto nunca en Old Trafford. Junto a Cristiano Ronaldo constituyó una sociedad magnífica que tenía el gol entre ceja y ceja. Con el luso al lado, Rooney disputó dos finales de Champions. En una se proclamó campeón. Ya sin el '7' volvió a disputar otra, pero por aquel entonces el Manchester ya no era lo mismo. Rooney tampoco. El pasado verano decidió volver a casa para, así, conseguir reencontrarse con su juego y demostrar que estaba capacitado para seguir al máximo nivel. Sin embargo, su temporada ha estado lejos del éxito.

RUMBO A LA MLS

Consciente de que aquel jugador determinante es pasado, Rooney podría haberse decidido por la MLS como un destino para terminar su etapa como futbolista. Tal y como apunta The Washington Post, el DC United está manteniendo conversaciones con él para convencerle y hacerse con sus servicios. Su contrato finaliza en 2019, pero la gran relación que tiene con el Everton podría facilitarle la salida.