A finales de 2006 aterrizó en Madrid un brasileño, con la mayoría de edad recién cumplida, que estaba llamado a ser el sucesor de Roberto Carlos. Ahora, 12 años después, Marcelo (Río de Janeiro, Brasil, 1988) puede presumir de haber superado el palmarés con el Real Madrid del que fue su ídolo y mentor durante el poco más de medio año que compartieron vestuario. El lateral es, como segundo capitán, una de las voces autorizadas de la plantilla de Zinedine Zidane que buscará en Kiev ganar su tercera Champions consecutiva.
"¡Qué cansancio!", asegura Marcelo al sentarse para contestar las preguntas de la entrevista de EL ESPAÑOL y EL BERNABÉU. Antes de empezar a responder, y sin perder en ningún momento la sonrisa, coge aire y bromea con Nacho, que pasa justo por detrás, sobre el tono de voz del central español. Tras una sesión de entrenamiento de 45 minutos, el jugador merengue expresa su satisfacción con el trabajo realizado durante la última semana para preparar la gran batalla ante el Liverpool. Se ve listo para conseguir un nuevo récord y quiere transmitir, al igual que su entrenador, que este Real Madrid tiene tanta hambre e ilusión como la primera vez.
Es la cuarta final de Champions en cinco años, la tercera consecutiva. ¿Se acostumbra uno a estos momentos previos? ¿Cómo se vive?
No, no nos acostumbramos para nada. Es siempre una emoción increíble estar en otra final. Estamos entrenando bien en esta semana de preparación para un grandísimo partido. Vamos a darlo todo para poder ganar.
¿Entonces se sigue teniendo los mismos nervios que antes de Lisboa, por ejemplo?
Incluso más.
¿Más responsabilidad?
No, más responsabilidad no. Responsabilidad tengo desde que llegué al Real Madrid. Tenemos que demostrar más. Tenemos que hacer más porque mucha gente piensa que como hemos ganado dos Champions seguidas esta ya no nos importa.
Curioso lo que dice sobre tener que demostrar más cuando han logrado un récord que nunca antes se había visto en la máxima competición continental. ¿Se minimizan los éxitos del Real Madrid?
Eso no lo sé. Eso lo dice la prensa, pero nosotros tenemos en nuestra cabeza lo que tenemos que hacer. Sabemos lo que es importante y lo que no. Esta final es especial: tenemos que jugar, dejarnos la piel en el campo y ganar.
¿Se ha sido injusto con el Real Madrid en este camino a la final? Incluso algunos han hablado de árbitros, pero los rivales han sido duros: PSG, Juventus y Bayern.
Sí. Nosotros hemos tenido méritos para llegar aquí y el Liverpool también. Ambos equipos merecemos estar aquí. Sobre la injusticia... siempre habrá alguien que hable mal del Madrid.
Tendrá un duelo con Salah, el jugador de moda en Europa. ¿Cómo ve a la estrella del Liverpool?
Bueno, yo creo que más importante que Salah es el equipo entero. Hay que estar preocupado con él y con todos. No podemos estar pensando solo en un jugador.
¿Y ve a Salah preparado para jugar en el Real Madrid? ¿Tiene el nivel?
Los grandes tienen que jugar en el Madrid y si algún día viene será bienvenido.
Hablábamos de esa lucha con el egipcio, pero a usted, a pesar de lo que siempre aporta ofensivamente y al juego del equipo, se le sigue criticando por la labor defensiva en algunas ocasiones. ¿Cómo se lo toma?
Nada, cuando me ponen arriba no me alegra y cuando me critican pues menos... Yo sé lo que hago bien y mal.
El Mundial está muy cercano también. ¿Ha hablado con Sergio Ramos sobre un posible final entre Brasil y España?
Todavía no hemos pensado en el Mundial.
Ha ganado una Champions en la prórroga con un gol suyo (en Lisboa contra el Atlético), otra en penaltis (en Milán ante el Atleti también) y la última arrasando (a la Juve en Cardiff). ¿Con cuál se queda?
Cada Champions es especial por su día y su final. Cada una lo es a su manera. Todas fueron diferentes pero especiales. Me quedo con las tres.
¿Y cómo le gustaría que fuera la de Kiev?
Que ganemos y hagamos un buen partido [risas].
¿Qué piensa de los que afirman que la Champions tiene menos mérito porque han tirado La Liga?
No pienso nada. No opino.
¿Es más importante la Champions que La Liga?
No, La Liga es la competición de la regularidad y la Champions es la fuerza porque están los mejores equipos del mundo. No creo que sea una mejor que la otra.
¿No te queda entonces antes con la Champions?
Me quedo con las dos [risas]. Si las puedo ganar... con las dos.
¿Cuál ha sido el momento más duro de la temporada y del que se acuerda ahora cuando mira atrás?
Creo que el inicio. Nos hemos dejado puntos importantes al comienzo de La Liga y de la Champions. Empezamos mal, pero hemos sabido volver más fuertes y coger la confianza otra vez. Estamos preparando bien esta semana de la final.
Se ha eliminado al campeón de Francia, al de Italia y al de Alemania... ¿Dónde estuvo la clave en el torneo? ¿Quizá contra el PSG cuando les daban por muertos?
¿Quién nos daba por muertos? La prensa. Nosotros sabíamos de nuestro potencial y lo que podemos hacer. Que lo diga la prensa no significa que sea verdad.
¿Cómo llega Cristiano? ¿Perfecto?
Pues llega muy bien, creo que sí. Listos estamos siempre.
El próximo año la final es en el Wanda Metropolitano, ¿se ve otra vez atendiendo a los medios en la semana del gran partido?
En un año... tú no sabes lo que vas a hacer mañana. ¿Gustarme? Claro que sí, pero no por ser en Madrid sino porque es especial siempre jugar una final.
¿Cuál es su mensaje al madridismo ahora en los días previos a la final?
Los madridistas saben que vamos a darlo todo para ganar esta final. Mi mensaje es que sigan ahí apoyándonos como siempre y ojalá que con vuestra energía positiva consigamos ganar este gran título.
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