Después de las horas más convulsas de la Selección en los últimos tiempos, las opiniones no dejan de sucederse. Los técnicos extranjeros culpan a Luis Rubiales de la tensa situación que envuelve a España a tan sólo un día de su debut en el Mundial, ante la Portugal de Cristiano Ronaldo. Hiddink se posiciona en favor de Julen Lopetegui. El entrenador holandés, actualmente sin equipo, aseguró que Lopetegui no iba a cambiar su modo de entrar "por irse del Real Madrid".

También salió al paso de las críticas de la prensa española y de la RFEF hacia el actual técnico del Real Madrid, Joachim Löw, quien califica la destitución del exseleccionador como "un martillazo" y considera que "hay tensiones dentro de la Federación y del equipo". 

DEL BOSQUE, AL ATAQUE

Tras estas palabras, faltaban las del hombre políticamente correcto por antonomasia del deporte español: Vicente Del Bosque. El exentrenador blanco y exseleccionador nacional, valoró la destitución del que hasta hace escasas fechas fue su sucesor en el marco de una entrega de premios de la Fundación Mapfre. Antes de la ceremonia, el salmantino dejó clara su posición antes de analizar las opciones del combinado nacional tras el terremoto promovido por la propia Federación. "No sé", comenzaba su alocución, para añadir inmediatamente después que "me baso en lo que dijo el presidente de la RFEF", pese a "no entrar en opiniones". 

Por su parte, el exseleccionador declaró que no habrá ningún problema de entendimiento con el nuevo seleccionador, Fernando Hierro. Además, manteniendo la línea que mostró el sucesor de Lopetegui en rueda de prensa, Del Bosque considera que "los jugadores actuarán con la mayor profesionalidad posible de cara al Mundial". El salmantino da la cara por Rubiales y considera que esta situación "es incómoda para la RFEF, pues el presidente "ya ofreció suficientes explicaciones sobre el asunto". Eso sí, no ha dudado en desear suerte tanto al flamante técnico madridista como a Hierro de cara a la nueva etapa de ambos.