El terremoto que ha sacudido a España en el Mundial de Rusia empieza y acaba en Luis Rubiales. El presidente de la Federación miente al decir que se enteró solo cinco minutos antes del fichaje de Lopetegui por el Real Madrid. El propio comunicado de la RFEF, posteriormente editado, es la mayor prueba de que ha sucumbido ante la campaña mediática y las presiones recibidas desde el anuncio. 

Rubiales conocía, a través del Real Madrid y del propio seleccionador, las negociaciones que mantenían para incorporarse en el banquillo blanco una vez terminara la participación de España en el Mundial. De hecho, según puede confirmar EL BERNABÉU, el presidente de la RFEF dio el visto bueno la semana pasada al fichaje y la entidad presidida por Florentino Pérez le informó que pagaría la cláusula de rescisión de dos millones de euros. 

El acuerdo mantenido por todas las partes fue guardar silencio hasta encontrar el momento oportuno para hacerlo oficial. Lo que Rubiales no perdona a Lopetegui es que este martes por la tarde le comunicara a los jugadores, sin su presencia, el acuerdo. La noticia fue tomada con total normalidad por la plantilla y todos se conjuraron para pensar solo en el Mundial. 

El Real Madrid y Lopetegui también informaron a Rubiales, que querían hacerlo oficial cuanto antes, ya que si España llegaba hasta la final la pretemporada del conjunto blanco comenzaría sin el entrenador. Cuando el máximo mandatario de la RFEF se entera de que se va a a anunciar, se encuentra en Moscú y cuando intenta hablar con el seleccionador está reunido con los futbolistas en la concentración de Krasnodar. 

Finalmente, Rubiales decidió despedir fulminantemente a Lopetegui ante la presión realizada por varios medios de comunicación y directivos federativos. La única excusa que encontró entonces el presidente de la RFEF fue editar el comunicado y manipular la verdad hasta afirmar que no estaba al tanto de las negociaciones.