Vinicius Junior jugó ante el Palmeiras su último partido con el Flamengo. El extremo brasileño partirá rumbo al Real Madrid para realizar la pretemporada. Finalizada esta, el nuevo entrenador Julen Lopetegui decidirá qué es lo mejor para la joven promesa: salir cedido o permanecer en el club blanco.

El citado encuentro finalizó con empate a uno, pero la imagen más representativa fue la terrible entrada que sufrió el propio Vinicius. Cuando el jugado cabalgaba la banda izquierda, Felipe Melo, veterano centrocampista defensivo con pasado en Europa, decidió frenarle con una segada brutal.

Vinicius quedó tendido en el suelo doliéndose del tobillo mientras se formaba una tangana. Los jugadores del Flamengo pidieron la tarjeta roja para el exjugador de, entre otros, la Juventus, el Galatasaray o el Inter Milán. Sin embargo, y de manera inexplicable, el árbitro le amonestó únicamente con amarilla.

El propio Vinicius se refirió al encuentro de la siguiente forma: "El partido se calentó mucho, el árbitro perdió el control y sabíamos en lo que iba a desembocar. Interrumpió el juego en todo momento". El jugador habló al término del partido para la cadena televisiva SporTV donde también se refirió a Melo: "Es mi amigo, pero el juego se calentó mucho. Ha llegado un poco fuerte, pero hay que reconocer que es el juego. Merecía ser expulsado".

Afortunadamente, lo que podría haber sido una grave lesión, quedó en nada. Vinicius finaliza su periplo en el Flamengo con diez goles y cuatro asistencias en 47 partidos, repartidos en apenas un año.