Brasil cumple con las expectativas y manda a la Tri a casa. Los aztecas pusieron todo su empeño durante el encuentro, pero no pudieron con una Brasil que se defiende a las mil maravillas. Además, el equipo que dirige Tité demuestra que sabe sufrir. Los primeros minutos de los de Osorio han sido espectaculares. Con mucha fe, creyendo en sus posibilidades y, como dijo Chicharito, pensando en "cosas chingonas". 

Brasil no encontraba su hueco en el partido. México tenía arrinconado a sus rivales, pero pronto aparecería el espíritu de la Canarinha. La verdeamarelha ha presentado su candidatura, por enésima vez, para levantar el Mundial el próximo domingo 15 de julio. Pasada la primera mitad del acto de apertura del partido, Brasil empezó a carburar y entraron en juego Coutinho, junto con Willian y, sobre todo Neymar.

El del PSG lo intentaba, asociándose con un Coutinho que no ha dado más que recitales futbolísticos durante este Mundial. Un espectáculo al que se sumó un Neymar que sigue in crescendo dentro del torneo. 

GOLAZO DE NEY

México empezó a apagarse. Brasil no permitía las tímidas acometidas aztecas, que cada vez se sucedían con menor regularidad. El del PSG quería sumarse a la fiesta ofensiva de los brasileños. Willian, intercalándose de banda constantemente, recibe un balón de Neymar. El del Chelsea sigue la carrera, se marcha de su par y la pone al corazón del área donde espera el '10' con la caña. El astro brasileño metió la pierna y adelantaba a su selección en el marcador. 

A partir de ese momento, Brasil dominó a su antojo, aunque concedió alguna que otra ocasión de los bisoños mexicanos. Coutinho lo volvió a intentar, pero se encontró con un inspirado Ochoa que evitó que el resultado fuera más abultado. Con el partido en el lugar que Brasil quería, el colegiado cogió su silbato y alzó los brazos señalando el túnel de vestuarios. Los de Tité pasan a cuartos gracias a un gol de Neymar y a otro de Firmino, aunque ante Bélgica o Japón se tendrán que medir sin Casemiro, que ha visto una tarjeta.