El Mundial fue para Francia. La selección dirigida por Didier Deschamps se coronó este domingo en el estadio Luzhniki tras pasar por encima de Croacia. Hugo Lloris levantaría el título bajo el cielo de Moscú -el segundo de la historia de los bleus-, trofeo que completará uno de los mejores palmarés de todo el mundo, el de Raphäel Varane.

Varane, a sus 25 años, ya es campeón del mundo. El madridista fue el eje de la zaga francesa, acompañando de Samuel Umtiti, y dio la solidez necesaria para un equipo que durante todo el torneo se caracterizó por su fortaleza atrás. Varane, que en la final volvió a estar impecable, completó un campeonato sensacional en el que incluso pudo marcar gol, en cuartos de final frente a Uruguay.

UN PALMARÉS A LA ALTURA DE MUY POCOS

Pocos títulos se le resisten a este coleccionista de trofeos y teniendo en cuenta su edad parece que está preparado para todo lo que se le ponga por delante. Este Mundial llega, además, en un año en el que el Real Madrid logró La Decimotercera, la cuarta Champions League para Varane. Ahí es nada. Las cuatro 'Orejonas' del central brillan en unas vitrinas que cuentan ya con 16 títulos. Dos Ligas, tres Mundiales de Clubes, tres Supercopas de Europa, una Copa del Rey y dos Supercopas de España son el resto de trofeos ganados por Varane en su corta pero intensa carrera.

SOLO 25 AÑOS Y LÍDER EN EL VESTUARIO

Varane no tiene techo. El francés es un jugador hecho para gana títulos y con toda la carrera que le queda por delante es difícil imaginar cual es su límite. A su edad le acompaña una madurez impropia de un chico de 25 años y es que además es ya todo un líder dentro de los vestuarios del Real Madrid y la selección francesa. Un futbolista con galones y carácter llamado en el futuro portar la el brazalete de capitán en su club y en su país. Este verano, sin ir más lejos, se ha convertido ya en el cuarto de la entidad merengue con la salida de Cristiano Ronaldo. Solo Ramos, Marcelo y Benzema están por delante de él.