El Manchester United quiso desembolsar una gran cantidad de dinero en el Santiago Bernabéu para llevarse a uno de los jugadores con mayor proyección del mundo. Varane, campeón del mundo con Francia y campeón de Europa con el Real Madrid fue el gran deseo de Jose Mourinho para reforzar la zaga. Los red devils tenían preparada una oferta de 112 'kilos', pero el conjunto merengue no escuchó ninguna. 

Tras la negativa blanca, el conjunto inglés quiso ahogar las penas con nombres como Harry Maguire, que acabó renovando con el Leicester o Jerome Boateng que decidió salir al PSG para finalmente no moverse del Bayern Múnich. El útimo nombre en sonar con fuerza ha sido Toby Alderweireld, el central del Tottenham podría ser uno de los refuerzos invernales.

Alderweireld siempre pareció la llegada más probable durante el verano, y aún podría llegar a un acuerdo en enero. El motivo es su contrato, le queda menos de un año en  con una opción para una extensión de un año que incluye una cláusula de liberación de 25 millones. Sin embargo, el internacional belga insiste en que nunca estuvo cerca de una salida de Tottenham ya que "Todo el mundo decía en todas partes que quería abandonar Tottenham definitivamente, pero no es así".

Varane, el eje de la defensa blanca

El central francés, de tan solo 25 años, ha demostrado que puede ser el compañero perfecto de Sergio Ramos, juntos han ganado las últimas cuatro Champions del equipo blanco y se han convertido en un muro impenetrable para los ataques rivales. Con Francia, fue el jefe de la zaga, incluso marcó un gol definitivo en los cuartos de final frente a Uruguay que valía para adelantar a los galos en el marcador. Una vida de blanco, además su contrato finaliza en 2021, donde con casi total seguridad volvería a renovar.