La selección alemana vive, quizá, el peor momento de su historia. Tras la debacle del Mundial de Rusia, donde cayeron en la fase de grupos, los de Löw no consiguen dar con la tecla que les devuelva el juego con el que llegaron a ser campeones del mundo hace algo más de cuatro años.

No pudieron con Francia, con la que empataron a cero en la primera jornada de la UEFA Nations League. Pero, sin duda, el golpe más duro ha llegado en el segundo partido de la competición. Holanda, que tampoco está viviendo su mejor momento, les endosó un 3-0 que dejó a los germanos tocados y casi hundido en el torneo.

Toni Kroos es uno de los capitanes de su país, un hombre importante que siempre da la cara cuando las cosas se tuercen, por lo que en esta ocasión no ha sido diferente. Tras el duelo en los Países Bajos, el madridista habló con los medios, a los que aseguró que la derrota "por supuesto que duele, especialmente cuando tienes la sensación de que has sido mejor que el rival"

Hundidos por la derrota

El futbolista del Real Madrid explicó que "es difícil encontrar las palabras tras perder por 3-0", y reconoce que "no ayuda decir que hicimos algo bien". Por ello admite que son "responsables de lo que ha ocurrido", y que están "muy decepcionados", porque querían "devolver algo" a la afición que les sigue en cada partido.

La situación de Alemania en la UEFA Nations League es muy complicada. Es último con solo un punto tras dos partidos ganados. Todavía tiene la oportunidad de conseguir acabar primera de grupo. Sin embargo, para conseguirlo tendrá que vencer en los partidos de vuelta tanto a Francia como a Holanda. De lo contrario podrían acabar últimos de grupo y ver cómo descienden a la Liga B del torneo europeo, lo que, tras lo ocurrido en el Mundial, sería el segundo varapalo en solo unos meses.