Este verano, el Real Madrid decidió reforzar el equipo en varios puntos claves. Uno de ellos fue el lateral derecho. La temporada pasada, Dani Carvajal no tuvo competencia real por el puesto, situación que quisieron para este curso. En la entidad de Chamartín querían tener un recambio de garantías para el de Leganés, y el objetivo estaba claro.

Álvaro Odriozola estaba en la agenda madridista desde hace mucho tiempo y, finalmente, en el pasado mercado veraniego de fichajes decidieron dar el paso y, en julio, oficializaron su incorporación. El vasco había demostrado en la Real Sociedad su gran nivel, sin embargo, el salto al Real Madrid es grande y no todos los jugadores están preparados para tener éxito. Sin embargo, en estos meses, el defensa ha demostrado que está preparado para el reto y ha sido una de las notas positivas del equipo.

Julen Lopetegui le conocía bien, de hecho fue el técnico merengue el que confió en Odriozola para el Mundial de Rusia, aunque finalmente no pudieran trabajar juntos por la decisión de Rubiales de despedir al entrenador. Por ello, desde la pretemporada le dio confianza para que se sintiera cómodo y se adaptara al equipo, y el lateral respondió en esos amistosos. Sin embargo, las lesiones lastraron su progresión en el inicio de la campaña. Pero estos problemas han quedado atrás y el lateral vasco, en su vuelta a los terrenos de juego, ha sabido responder a la confianza del club blanco y su entrenador.

Buena imagen pese al bache de resultados

El cuadro blanco no vive su mejor momento. Los de Lopetegui están instalados en un bache de resultados del que, desde que perdieran contra el Sevilla, no han sabido salir. Sin embargo, uno de los aspectos positivos que se han podido sacar de esta crisis de resultados es el rendimiento de Odriozola.

El zaguero vasco ha jugado en los dos últimos duelos del equipo, frente al CSKA de Moscú en Champions League y ante el Alavés en La Liga. La lesión de Carvajal ha hecho que el ex de la Real Sociedad tuviera que saltar al terreno de juego obligatoriamente, y ha respondido a la perfección a lo que le pedía Julen Lopetegui.

Odriozola ha cumplido tanto en la parcela defensiva como en la ofensiva en todos los partidos en los que ha tenido la oportunidad de participar. En defensa, principal tarea de un lateral, se ha mostrado serio y sin cometer graves errores que hayan perjudicado a su equipo, y en ataque ha mostrado que puede ser un puñal por la banda que puede llegar hasta la línea de fondo y meter centros peligrosos a sus compañeros.

El parón de selecciones y lo que se avecina

Tras el Mundial de Rusia, Odriozola no ha podido acudir a una convocatoria de la selección española. Sin embargo, esta semana le ha servido para continuar con su adaptación al Real Madrid y cogiendo mecanismos del estilo que quiere instaurar su entrenador en el equipo. Lopetegui, que está bajo mínimos sin los internacionales, ha podido seguir de cerca e individualmente al lateral en los entrenamientos que han realizado en los últimos días.

Odriozola continúa preparando en la Ciudad Real Madrid los próximos partidos, donde tendrá que ser titular obligado ante la baja de Carvajal. El vasco casi ha alcanzado ya los 230 minutos disputados esta temporada, y frente al Levante, en la competición doméstica, y el Viktoria Plzen, en la Champions League. Estos dos partidos le servirán para seguir creciendo y preparándose para el que puede ser su primer gran partido en el Real Madrid. Si su compañero en el lateral no se recupera, el vasco ocuparía esa posición frente al Barcelona en el primer Clásico de la temporada, la que sería la prueba definitiva para demostrar que el conjunto blanco ha fichado al sustituto perfecto de Carvajal en el lateral derecho.