Los últimos partidos disputados han dejado una sensación amarga en el Real Madrid. El conjunto blanco no ha conseguido mostrar su mejor versión, lo que ha repercutido en los resultados. Cuatro partidos acumula el conjunto blanco sin conocer la victoria, lo que ha hecho que las críticas al equipo y al entrenador no hayan cesado en los últimos tiempos.

En este ambiente enrarecido llegó el parón de selecciones. Quince días en los que Julen Lopetegui podría analizar cuáles han sido los errores de su equipo en estos partidos e intentar ponerle remedio de cara a los próximos duelos que afrontará la entidad de Chamartín en las próximas semanas.

Sin embargo, no todo son malas noticias para el técnico madridista. El técnico vasco ha recibido buenas nuevas en los últimos tiempos que le hacen ser optimista de cara al partido con el Levante del próximo fin de semana y para los siguientes. El Real Madrid necesita darle la vuelta a la situación, y Lopetegui tiene motivos a los que agarrarse.

La recuperación de Marcelo

En los últimos partidos Lopetegui no había podido contar con Marcelo por lesión. El lateral brasileño es uno de los grandes puntales en equipo por todo lo que aporta desde el lateral izquierdo, por lo que había sido un palo muy importante para el equipo merengue. Sin embargo, está situación ha llegado a su fin.

El parón por selecciones ha servido para que el segundo capitán se recupere y pueda estar listo para los próximos partidos. Durante estos días cogerá el ritmo que pueda haber perdido en las últimas semanas en las que ha estado parado. De esta manera podrá volver en perfecto estado para la vuelta de La Liga y, posteriormente, de la Champions League.

Isco ya toca balón

La gran ausencia del conjunto blanco durante el bache de cuatro partidos sin ganar ha sido Isco Alarcón. El malagueño no ha podido ayudar a sus compañeros durante esta mala racha por una apendicitis que le llevó al quirófano un día antes de enfrentarse al Sevilla en el Sánchez Pizjuán.

Sin embargo, Isco ya ve la luz al final del túnel. Si bien todavía no está recuperado del todo, el ex del Málaga ya ha comenzado a tocar balón en las instalaciones de la ciudad deportiva. Es el primer paso para que el centrocampista pueda volver a los terrenos de juego. El objetivo es que para El Clásico pueda estar en buenas condiciones para poder participar en dicho encuentro, algo que, con estos avances en su recuperación, está más cerca de cumplir.

La buena actuación de Vinicius con Brasil

Hasta catorce jugadores se han marchado en este parón de selecciones para jugar con sus respectivos países. Uno de ellos ha sido Vinicius, que iba convocado por primera vez con la Sub 20 de la selección brasileña. Y, hasta el momento, las cosas no le han podido ir mejor.

En el primer partido de los dos que tiene que disputar Brasil contra Chile, el madridista ha sido uno de los grandes protagonistas. Aunque falló un penalti, Vinicius demostró el desparpajo que le caracteriza y, gracias a una gran jugada que inició en el centro del campo, dio la asistencia a Rodrygo que permitió a los cariocas empatar el partido.

Las ganas de triunfar de los fichajes

Si bien las últimas semanas no han sido las mejores para Lopetegui y sus jugadores, hay un aspecto positivo que se puede destacar: el hambre de los fichajes. Mariano es el ejemplo más claro de ello. Tras su gol a la Roma, el delantero ha ido sumando participaciones en las que ha dejado claro que ha vuelto para quedarse. El ariete ha mostrado un hambre insaciable, aunque el gol se le haya resistido en los últimos encuentros.

Un caso parecido es el de Odriozola. El lateral ya ha olvidado las lesiones que le impidieron estar con el resto del equipo en el inicio de la temporada y, tras la lesión de Carvajal, ha tenido la oportunidad de reivindicarse. El vasco ha dejado grandes actuaciones que llenan de esperanza a los aficionados respecto al gran futuro que tiene el defensa por delante.

El último es Courtois. El belga ha peleado por venir al Real Madrid en los últimos años, y no quiere dejar escapar esta oportunidad. El guardameta ha ido ganando confianza poco a poco en el equipo y ante el Atlético de Madrid cuajó su mejor actuación, demostrando que, a sus 26 años, el cuadro merengue tiene a un gran portero de presente y futuro.