El Real Madrid visita este domingo al Barcelona en la décima jornada de La Liga. El conjunto blanco busca lograr una victoria que le dé un empujón anímico necesario tras unas malas semanas en las que el juego ni los resultados, salvo frente al Viktoria Pilsen, han acompañado al conjunto blanco. Sin embargo, el escenario es inmejorable para poder conseguir un necesario triunfo.

Uno de los hombres claves en El Clásico será Gareth Bale. El galés vivirá su primer duelo de este tipo siendo el líder del ataque merengue. La situación del '11' madridista ha cambiado drásticamente en los últimos meses. El pasado verano, el de Cardiff estuvo replanteándose su futuro, llegando a pensar en buscar una salida a otro equipo, con el Manchester United tras sus pasos.

Sin embargo, este pensamiento ya ha quedado lejos. Tras la marcha de Cristiano Ronaldo la confianza mostrada por Julen Lopetegui, Bale decidió quedarse en el Real Madrid y dar un paso al frente respecto a su importancia en el equipo, que se demostró en el inicio de temporada.

Con cuatro goles en los seis primeros partidos del curso, Bale vivió un inicio de campaña espectacular. El ex del Tottenham demostraba que estaba capacitado para liderar al equipo en la delantera, pero sus cifras goleadoras se han frenado en los últimos partidos. Además, las molestias físicas le han lastrado en las últimas semanas, no pudiendo jugar incluso con Gales durante el parón de selecciones. Pero estos malos momentos han quedado ya atrás y está en perfecto estado para afrontar un partido tan complicado como el de este domingo.

Su velocidad, clave ante la defensa del Barça

Este domingo, Bale debe demostrar que está capacitado para ser el protagonista en este tipo de partidos. Como ya hiciera en la última final de Champions League, donde marcó el doblete que dio, en gran parte, el tercer título europeo consecutivo al Real Madrid, es un partido marcado en rojo para brillar.

Bale será clave ante una defensa del Barça que no vive su mejor momento. Gerard Piqué y Clement Lenglet no están aportando la seguridad que deberían, por lo que la velocidad del galés puede causar estragos. El catalán y el francés están ofreciendo un rendimiento, cuando menos, regular, y el conjunto catalán está perdiendo puntos por este motivo.

Prueba de ello es que el Barcelona lleva desde la jornada 2 de La Liga sin acabar un partido manteniendo la portería a cero. Once goles son los que han recibido en las últimas siete jornadas los de Ernesto Valverde en la competición doméstica. Por ello, el '11' madridista se presenta como la próxima seria amenaza para una zaga que mide momentos muy bajos.

Sus antecedentes frente al Barcelona

El balance goleador de Bale contra el Barcelona no es tan bueno como cabría esperar. En los diez partidos que ha jugado el galés contra el conjunto de la Ciudad Condal, solo ha conseguido hacerle dos goles. Sin embargo, curiosamente, ambos han sido jugando dichos partidos como visitante, aunque solo uno de ellos en el Camp Nou.

El último de estos dos goles fue no hace mucho, la temporada pasada. Un zurdazo imparable para Ter Stegen desde dentro del área ponía el 2-2 en un partido que acababa con empate en el marcador. Pero, sin duda, el tanto que más recuerdan los aficionados es el de la final de Copa del Rey en Mestalla, donde el Madrid jugaba como visitante. Aquella carrera frente a Bartra, al que destrozó por velocidad, es todavía recordada por darle la que, hasta ahora, es la última que ha conseguido el Real Madrid.

Este domingo, el galés tiene una nueva oportunidad para seguir ampliando estos números en los Clásicos, y en el Camp Nou. Junto a Karim Benzema, Bale intentará perforar la portería defendida por Ter Stegen y ayudar a su equipo a conseguir una victoria vital tras la mala racha de juego y resultados, menos el pasado martes, vivida en las últimas semanas.