Pocos podrían esperar que a estas alturas de la temporada, el PSG tuviera pendiendo de un hilo su participación en la Champions League. Si bien es cierto que el sorteo le deparó un grupo complicado, los de Tuchel eran los claros favoritos para pasar como primeros. Tras cuatro jornadas el conjunto parisino marcha tercero por detrás de Liverpool y Nápoles.

La mala clasificación del PSG en Champions obliga al equipo a ganar los dos próximos partidos si quiere estar en octavos de final. Depende de sí mismo, pero teniendo en cuenta que debe recibir al Liverpool, finalista de la pasada Champions, y verse las caras contra el Estrella Roja, que ya dio la campanada contra los reds, no será nada fácil.

Al borde del caos, el PSG se juega mucho más que su continuidad en la Champions League. En primer lugar está el aspecto económico. Caer en fase de grupos le permitiría ingresar 15,2 millones por participar, a lo que hay que sumar 2,7 por cada victoria y 0,9 por cada empate; muy lejos de los casi 100 kilos que se llevará el equipo que alce 'La Orejona' en el Wanda Metropolitano.

Pero lo que más preocupa en el Parque de los Príncipes es la situación de sus dos principales estrellas: Neymar y Mbappé. Un nuevo fracaso en Champions obligaría por tema de Fair Play Financiero a vender al menos una de sus estrellas. Después de salvarlo de puntillas este verano, un pinchazo de tales dimensiones sería catastrófico y el club galo se vería obligado a dar un paso atrás en su mega-proyecto.

Neymar, una situación insostenible

Neymar, que llegó a un acuerdo para permanecer un año más, estaría más fuera que dentro. La situación sería insostenible y es que lo único que ata actualmente al brasileño con el club francés es el conseguir algo grande: la Champions. Las últimas filtraciones de Football Leaks han sacado algunos de los trapos sucios del PSG y este viernes desde Francia desvelaban la excéntrica prima que tiene al crack gaucho que le llevaría a cobrar 375.000 euros por un bono de comportamiento que se basa, entre otras cosas, en aplaudir a su público tras los partidos.

Después de que el PSG cayera el curso pasado en octavos de la Champions contra el Real Madrid, sumada a la salida de Cristiano Ronaldo del club blanco, provocó que su llegada al Santiago Bernabéu estuviera cerca. Pero Neymar, quien había estado lesionado cerca de media temporada desde aquella eliminatoria, se dio otra oportunidad en París, la cual difícilmente esté dispuesto a dar después de otro fracaso todavía peor que el anterior.

Mbappé y el hambre de títulos

Pero el PSG debe tener cuidado con su otra estrella, Mbappé. Este dio el salto del Mónaco al PSG para aspirar a grandes cosas, no a ganar la Ligue-1 año tras año. Aunque aún tenga toda su carrera por delante, puesto que solo tiene 19 años, ver como su equipo cae de esta manera en Europa le podría hacer replantearse su futuro. El dinero no lo es todo y Mbappé, como Neymar, aspira a convertirse en el mejor del mundo. Para eso, necesita un equipo a la altura.

Todo esto con el Real Madrid al tanto. Después de que el club blanco no acometiera ningún gran fichaje este verano, el siguiente podría ser el indicado si Neymar o Mbappé se ponen a tiro. Son los dos jugadores los cuales considera merecedores de realizar un gasto millonario. Entrar en guerra contra el PSG no es algo aconsejable, pero de pedir salir una de sus figuras no les quedaría otra. El club blanco tiene capital y sería difícil tanto para Neymar como para Mbappé decir que no al Madrid en una situación así.