La llegada del Real Madrid a Vigo ha causado una gran expectación en la previa del choque ante el Celta en Balaídos. Los hombres de Santi Solari han parado con sus aficionados a firmar autógrafos y a hacerse fotos al bajar del avión. Sin embargo, la sesión de firmas en sí la iban a protagonizar Gareth Bale y Toni Kroos, dos de los grandes pesos pesados del vestuario blanco.

El atacante galés y el centrocampista alemán han firmado camisetas y balones a algunos de los hinchas más jóvenes, sobre todo niños pequeños. De esta manera, han podido acercarse a sus ídolos y cumplir uno de los sueños de todo madridista, al tener de frente a dos de los pilares fundamentales para el juego del equipo.

Al finalizar la sesión, los jugadores han puesto rumbo a sus habitaciones para concentrarse antes de poner rumbo a Balaídos. Y es que a partir de las 20:45 horas de este domingo, los hombres de Santi Solari afrontan un duelo en el que los tres puntos se antojan vitales para proseguir la buena dinámica de los tres últimos choques.

Desde la llegada de Solari al banquillo, el Real Madrid ha recuperado la senda de la victoria y el olfato goleador que tanto ha acusado en la mala racha atravesada con Julen Lopetegui al mando del equipo. Fue la derrota por 5-1 ante el Barcelona en el Camp Nou la que supuso su destitución, dando por terminado así su ciclo como técnico blanco y dejando paso al que era entrenador del Castilla.

Más unidos que nunca

Por tanto, la racha goleadora y de victorias, sumado a la imbatibilidad, son los factores a tener en cuenta para dar motivos de confianza a conseguir los tres puntos a domicilio ante el Celta. De hecho, en las últimas visitas de los blancos a Balaídos, siempre ha encajado al menos un gol, por lo que de alargar la racha conservada, supondría acabar con otra estadística negativa y reafirmar el buen momento ataravesado.

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