La Copa del Rey permitió este jueves ver a Vinicius titular en el Santiago Bernabéu. Era la primera vez que el brasileño salía de inicio en el coliseo blanco. Una nueva prueba en su camino en el Real Madrid y es que todo el madridismo esperaba mucho de él en un partido así.

Ya en la ida de Copa brilló en Melilla repartiendo dos asistencias, pero en este partido tenía la misión, y casi la obligación de marcar. Y lo hizo. Vinicius no dejó de intentarlo hasta que consiguió batir la portería rival. Le costó varios intentos y el tanto llegaría tras recoger su propio rebote, pero se lo merecía. También dio una asistencia.

El Santiago Bernabéu disfrutó con su joya. Había muchas ganas de verle y se notaba en el ambiente. Cada regate que hacía, cada carrera, levantaba al aficionado de su asiento, esperando ver algo grande de un jugador que apenas tiene 18 años. Así es Vinicius y así es la enorme expectación que genera cada vez que juega.

El efecto Vinicius en el Santiago Bernabéu

Esta era una oportunidad importante para Vinicius de hacerse notar. Venía de quedarse sin jugar los dos últimos partidos contra Roma y Valencia y tenía que volver a impactar al aficionado. Este salió satisfecho con el partido la gran perla blanca y, sobre todo, se divirtió con él. Porque es un jugador diferente y hace cosas que el resto no y eso gusta mucho.

Vinicius nunca ha dado un paso atrás desde que está en el Real Madrid. Cada prueba que se le ha presentado en el camino, la ha afrontado de frente y, lo que es mejor, la ha superado con creces. Debutó en un derbi, se salió en Melilla, 'marcó' contra el Valladolid, y ahora, por fin, se estrenó como goleador a ojos de un público que está entregado a él. Le da igual el escenario que tenga enfrente que no se achanta.

En pocos meses ha demostrado una rapidísima adaptación. Nadie se esperaba que en unos meses el jugador se desempeñara de esta manera sobre el césped y aguantara de tal forma la presión, ni por su edad, ni por haber jugado toda su vida en Brasil. Pero el proceso está siendo tan rápido que hasta Vinicius ya se atreve a hablar.

Tras el partido sorprendió ver a Vinicius por zona mixta, pero sorprendió todavía más verle hablar en perfecto español con los periodistas allí presentes. Se tomó su tiempo para hablar con todos y se marchó. Con la tranquilidad de haber completado su mejor partido hasta la fecha en el Real Madrid y habiéndose puesto ante los 'leones' en zona mixta.

Y Vinicius bailó

Tanto dentro como fuera del campo se desenvuelve como mucha soltura. Una adaptación de la que tienen mucha culpa Marcelo y Casemiro. A este último le dedicó el bailecito con el que celebró tras marcar. Como Ronaldinho, Robinho o Neymar. Vinicius se marcó su primer baile en Madrid y promete a que se le verá muchas veces más así en el Santiago Bernabéu. Porque Vinicius es alegría y ya dejó claro que a él lo que le import es "trabajar, marcar goles y ser feliz". Eso se ve reflejado en su fútbol.

Un día redondo de principio a fin para Vinicius y a ojos de su amigo y compañero Rodrygo. La otra perla brasileña del Real Madrid conoció el Santiago Bernabéu este jueves, como hiciera un año atrás Vinicius. Acabó la temporada en Brasil y se vino con su familia a ver el partido. Estuvo en el palco con su familia, estuvo con Florentino Pérez y, por supuesto, con Vini. Vio su recital sobre el campo y pudo comprobar cual es el camino a seguir una vez aterrice definitivamente el próximo verano.

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