Año nuevo, vida nueva... pero en Madrid. Asensio se despide en estas fechas de un 2018 que empezó de la mejor manera y generando mucha ilusión en torno a él y que terminó apagándose y, para colmo, lesionado. Sin embargo, nadie en el club ha dejado de confiar en él y se espera que 2019 suponga un salto para Marco.

El Real Madrid afrontó este verano la marcha de Cristiano. Ante las dificultades que presentaba el fichaje de un sustituto, el club decidió apostar por lo que ya tenía -que era bastante bueno- y esperar un salto en jugadores como Bale o, en este caso, Asensio. A sus 22 años y tras dos temporadas en el club con un rol secundario, le llegó su momento de dar un paso al frente en el trece veces campeón de Europa.

El bajón de Asensio en los últimos meses

De primeras a Asensio no pareció pesarle sus nuevas responsabilidades. Su comienzo de temporada fue sobresaliente y se asentó en la titularidad con Lopetegui. Pero el equipo, con Julen al frente, se fue apagando progresivamente y con él Asensio. Varias semanas sin ser decisivo que se acabaron convirtiendo en meses. Tampoco encontró su sitio con Solari y el argentino fue tajante. Le mandó al banquillo junto a Isco, mientras que el titular ha sido casi siempre Lucas Vázquez.

El final de año se ha cebado con Asensio al que una lesión en el cuadriceps le tendrá un tiempo de baja. Algo notó mal contra el CSKA y se rompió en el Mundial de Clubes apenas quince minutos después de saltar al campo. Deberá parar el mallorquín. Un tiempo que le puede venir bien para alejarse de los focos y regresar con las pilas cargadas.

Pero tampoco se puede decir que 2018 haya sido un mal año para él. Ha ido ascendiendo en la rotación blanca y quedó claro que el club apuesta firmemente por él. Dio un paso atrás en estos últimos meses, pero no tiene todo perdido, ni muchos menos. Sus dos temporadas y media en el primer equipo blanco han servido para ver mucho de Asensio y cosas muy buenas.

El club arropa a Asensio

Asensio se despide de 2018 con un sabor agridulce. Era un año importante para él, como lo será el 2019. A su vuelta tendrá que demostrar que no se ha estancado en su prometedora progresión y que esto se ha tratado de un simple bache. Sus compañeros le arropan, también un Solari que le va dando oportunidades y también el club, como evidenció Florentino Pérez con su cercanía con el mallorquín e Isco en la comida navideña.

Ni se quiere oír hablar de la posibilidad de que Asensio salga del club. En invierno es una utopía, pero también lo es de cara al próximo verano. No hay ningún indicio para pensar que el Madrid trabaje o se plantee siquiera su venta. El Real Madrid no ha perdido la confianza en la mayor promesa del fútbol español y por la que tanto mimo se ha puesto en los últimos dos años.

El propio jugador también parece centrado plenamente en triunfar en el Real Madrid y cumplir con las expectativas puestas en él. Su agente habló recientemente a hablar en Italia sobre su representado y dejó claro que "no tiene ninguna intención de irse del Real Madrid". Por delante tiene varios meses para revertir su situación y recuperar el sitio que le pertenece como uno de los herederos de Cristiano Ronaldo. Por lo pronto, Asensio ya está centrado estas navidades en recuperarse de su lesión y volver lo antes posible.

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