En el Real Madrid corren nuevos tiempos desde la llegada de Solari. El técnico argentino ha ido imponiendo cada vez más su mano en el equipo y eso se ha notado sobre todo en el peso que han ido ganando los más jóvenes en el equipo progresivamente. Las bajas les han abierto las puertas y los Vinicius y compañía lo están aprovechando.
Los niños de Solari son cada vez más importantes y este confía en ellos. Se vio contra el Betis, un partido de Liga importante puesto que se venía de dos pinchazos seguidos, y se ha visto en Copa del Rey contra un Leganés que ya el curso pasado acabó con el Madrid y los suplentes de Zidane. Porque Solari ha conseguido que la segunda línea blanca dé un paso adelante y, lo más importante, que los jóvenes cuenten.
El tridente indiscutible de Zidane
La mejor prueba está en el centro del campo donde para Zidane siempre fueron indiscutibles Casemiro, Modric y Kroos. Fue el tridente por el que apostó desde su llegada y en el que confió hasta el día de su salida. Dos años y medio sin cambios, que realmente no hacían falta. Si acaso, la única alternativa a los tres en este tiempo fue Mateo Kovacic, aunque el croata acabó saliendo el verano pasado por la falta de oportunidades.
A Zidane se le achacó que no contara más con jugadores como Marcos Llorente o Ceballos. Los dos tuvieron apariciones testimoniales con el Madrid la temporada pasada, sumando entre los dos solo 1.962 minutos, la mayoría de ellos en partidos residuales. La tendencia ha cambiado drásticamente y estos dos, junto a Fede Valverde, están convenciendo mientras juegan cada vez más. Llorente y Ceballos ya se acercan a la cifra que registraron el curso pasado (llevan 1.928 minutos) y sumando a Fede lo superan ampliamente (2.447').
Llorente pelea un puesto en el once
Marcos Llorente incluso ha demostrado que nadie es indiscutible peleándole el puesto a Casemiro. La lesión del brasileño le dio paso a un jugador que llevaba trabajando desde el verano de 2017 en la sombra, sin apenas tener oportunidades. Pero Llorente nunca dejó de trabajar hasta que su momento le llegó y lo aprovechó. Fue la sensación del Madrid en el cierre de 2018 y en el Mundial de Clubes se terminó de enumerar. Una desafortunada lesión (la primera de su carrera) le ha apartado hasta ahora, pero a su vuelta no regresará a ese rol secundario que tuvo desde tiempos de Zidane.
Ceballos y su año de reivindicación
La situación de Ceballos también ha dado un giro drástico. El utrerano ya contó con Lopetegui y sus actuaciones le llevaron a la Selección, donde ya es un fijo con Luis Enrique. Con Solari también ha gozado de los minutos que le dio Julen y no Zidane, aunque en las últimas semanas había perdido protagonismo y no terminaba de brillar cuando saltaba al campo. Hasta que llegó el partido contra el Betis. Ceballos se vistió de héroe en la que fuera su casa. Un gol en el 89' de falta y con todo el público en contra para dar la victoria al Madrid y mandar un claro mensaje.
La irrupción de Valverde en el Madrid
El trío lo cierra Fede Valverde. El uruguayo fue una de las revelaciones de pretemporada, pero Lopetegui no le dio más que un partido para que jugara. Con Solari ha ido entrando de vez en cuando, pero ha sido ahora con la lesión de Kroos cuando de verdad está teniendo minutos. La titularidad contra el Betis le terminó de consagrar. Es el más joven de los tres (solo tiene 20 años), pero su enorme proyección le está permitiendo labrarse un hueco en el primer equipo en su primera temporada dentro del vestuario blanco.
[Más información: Isco y Marcelo, una cuestión de estado en el Real Madrid]