Dos futbolistas se han convertido en el último año en la esperanza de Brasil. Los dos tienen varias cosas en común: ambos han nacido en el siglo 21 y ambos han fichado por el Real Madrid. Se trata, como no, de Vinicius Júnior y Rodrygo Goes. El futuro es suyo, pero cada vez pisan más fuerte en el presente.

Mientras en el Real Madrid se frotan las manos, lo mismo hacen en su país. En Brasil les han visto crecer en las diferentes categorías inferiores de la canarinha y ha sido en la Sub20 donde han alcanzado su explosión definitiva. Lo hacía Vinicius meses atrás y lo hace ahora Rodrygo en el Sudamericano que se disputa estos días en Chile, donde es una de las grandes atracciones.

Rodrygo, sin un Vinicius que se quedó en Madrid, está liderando la canarinha Sub20 en una competición para la que su selección es favorita. No le pesa la mochila sin su amigo a su lado y así se pudo comprobar esta última jornada en la que Brasil se impuso a Venezuela gracias a dos goles de Rodrygo. El extremo del Santos mostró su enorme calidad en dos tantos de bella costura.

Vinicius explota en el Madrid; Rodrygo, en Brasil

Sus compañeros confían en él y en Brasil alucinan con sus características. Él asume la responsabilidad con naturalidad: "No puedo entrar al campo y ser uno más, tengo que decidir los partidos, tengo que ser el mejor en todo lo que haga", decía tras el partido. Esto ha provocado un montón de peticiones a Tite, seleccionador nacional de Brasil, para que tenga en cuenta para próximas convocatorias a Rodrygo... y a Vinicius.

La pareja de madridistas están tirando la puerta abajo. Uno con la Sub20 de Brasil y otro ya en el Real Madrid. En su país no está pasando desapercibido nada de lo que hace Vinicius ya con la camiseta blanca. En unos meses ha pasado de jugar en el Castilla a hacerse fijo en el once de Solari. Eso en su primer año y con solo 18 años, un prodigio pocas veces visto antes en la entidad merengue. Todo el mundo se pregunta cuándo recibirá la llamada de la absoluta.

Tite piensa en ellos para la absoluta

Ni Vinicius ni Rodrygo han debutado todavía con la Brasil de Tite. El seleccionado dijo a comienzos de temporada que ha llegado a tener en cuenta al ex de Flamengo. Aunque tuvo mejores palabras aún para su compañero y es que de Rodrygo dijo que "parece un jugador veterano, está maduro en la toma de decisiones". Dicho esto, parece cuestión de tiempo que tanto uno como otro acaben acudiendo a filas en un equipo donde ya les esperan Marcelo y Casemiro, dos de los pesos pesados de la canarinha, y que conocen bien a las nuevas joyas de su país.

Uno que les espera también es Neymar, la estrella incondicional de Brasil. El '10' del PSG está encantado con la irrupción de los dos jóvenes talentos y sabe que algún día tendrá que cederles el testigo. No ha tenido problemas en ayudar a impulsarlos y sabe que son dos efectivos muy a tener en cuenta de cara a medio plazo y sobre todo para el Mundial 2022, la gran obsesión de Neymar. Ni en 2014 ni en 2018 la canarinha cumplió con las expectativas y Neymar sabe que en Qatar puede ser su última gran oportunidad, teniendo en cuenta que en 2026 cumplirá 34. Por eso empiezan a tener prisas en Brasil para que Vinicius y Rodrygo den el salto más pronto que tarde.

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