Luka Modric protagonizó una de las jugadas polémicas del encuentro de ida de la Copa del Rey entre el Real Madrid y el Girona. Después de lo sucedido con Gorka Iraizoz en el minuto 35, el centrocampista balcánico caía dentro del área del conjunto catalán. Una acción por la que los blancos pidieron la pena máxima, pero que no fue concedida por Undiano Mallenco. Tras la revisión del VAR, desde la sala de videoarbitraje no le corrigieron en su decisión.

Cuando el Real Madrid más se encontraba volcado en ataque, Luka Modric recibió un pase que trataba de rematar dentro del área llegando desde atrás, pero Douglas Luiz apareció por detrás y, aunque tocó el gemelo del futbolista del equipo blanco también tocó el balón, lo que primó el árbitro del encuentro a la hora de tomar una decisión. La acción debería haber sido señalada en favor de los blancos, pues el jugador del Girona toca antes la pierna que el balón.

El juego estuvo parado unos instantes mientras el videoarbitraje actuaba para evaluar la decisión de Undiano Mallenco, pero finalmente refrendó lo que dijo el navarro sobre el césped y el partido continuó. La labor del árbitro está siendo observada con lupa por la afición desde el primer momento que, como protesta por las últimas decisiones que han perjudicado a los blancos, le han dedicado varios cánticos al colegiado.

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