La política ha vuelto a entrar en escena en un partido del FC Barcelona. Esta vez con esteladas, como es habitual, y con una pancarta que rezaba que la "autoderminación no es un crimen". No será la primera vez ni la última que la afición más radical utilice a su equipo para cumplir objetivos políticos. Además su presidente, Bartomeu, confirmó que nunca requisaría esas pancartas y que sus socios tienen libertad de expresión en dichos temas.

En el primer Clásico de La Liga ya utilizaron ese lateral del estadio para colocar nuevas pancartas y banderas en favor de la Independencia. Una situación ya indefendible, ya que campan a sus anchas y tienen total libertad para criticar y lanzar mensajes tan polémicos como el de este miércoles. Una mezcla de fútbol y política que solo perjudica al Barcelona y a sus jugadores. 

En esta ocasión han utilizado el factor del rival, ya que un partido de la trascendencia de un Clásico no iba a pasar desapercibido, y todo el planeta podría ser testigo de esta provocación mediante pancartas y banderas. La UEFA ya ha tomado medidas en contra de las personas que logran introducir estos mensajes, mientras que en España no reciben ningún castigo. 

Varios aficionados querían parar el partido

Quim Molins, presidente del Un Crit Valent quería que los aficionados fueran con esteladas al Camp Nou, pero quiere ir un paso más allá y pretende que haya una invasión de campo y parar el Clásico, que "sería pacífica, una sentada de tres minutos y marchar, sin provocar incidentes". 

Quim también tiene claro que no hace falta que le recuerden lo que tiene que hacer una vez llegue al estadio y vea a los jugadores del Real Madrid: "No hace falta que un CDR me diga que silbe al Real Madrid, eso lo haré siempre".

[Más información: Los independentistas de 'Un Crit Valent' quieren boicotear El Clásico con una invasión de campo]