El Real Madrid no para. Tras una semana intensa en la que se empató con el Barça en el Camp Nou y se ganó al Atlético en el Wanda, los de Solari afrontan ahora la Champions League. Por un momento, el equipo deberá desviar la mirada de los Clásicos que se vienen en Copa y en Liga y tendrá que centrarse en su visita al Johan Cruyff Arena de este miércoles.

La Champions siempre es la prioridad dentro del vestuario del Real Madrid. Pese a estar metido en plena lucha por La Liga y la Copa, la Champions es la Champions y tiene ese aura especial que la rodea siempre. Este año, además, tiene el punto extra de motivación de que la final se dispute en el Wanda Metropolitano.

Seguir haciendo historia, eso es lo que ronda la cabeza de los jugadores blancos en su competición especial. Ganar la cuarta seguida no es una barrera, sino un impulso. Y qué mejor que volver a jugar la Champions justo en el momento en el que el Real Madrid llega al alza en el último mes.

El Real Madrid siempre da la cara en Champions

La Champions le pone al Real Madrid y hasta en los peores momentos, el equipo parece sacar un resquicio para brillar en Europa. Lo hizo cuando peor estaba antes y después del cese de Lopetegui, jugando dos de sus mejores partidos de esta temporada (los dos ante la Roma). El gran 'pero' fueron los choques contra el CSKA, sobre todo el 0-3 de la vuelta, pero entonces el club blanco ya tenía asegurada la primera plaza.

A eso se le suma que el Real Madrid lleva una trayectoria impecable en los octavos de final desde hace ocho temporadas. En total 16 partidos disputadas en esta ronda y solo una derrota. Por supuesto, el club blanco ha pasado a cuartos en todas ellas y no solo eso, sino que acabaría llegando mínimo a las semifinales. Esta vez, el rival será el Ajax que no llega bien y que, a priori, no debería ser un contrincante muy correoso para los de Solari.

La cuarta seguida y la primera de Vinicius

Pero, lo más importante es que el vestuario cree. Cree en ganar La Decimocuarta (o 'La Decimowanda') y cree en ganar un triplete que hace semanas era una completa utopía. Levantar los tres trofeos en el mismo año es lo que le falta a este equipo de leyenda y el sentimiento es que no habría mejor ocasión que lograrlo en el año que le dieron por muerto incluso antes de la mitad de temporada.

Solari ha dado con el equilibrio en su plantilla, donde los más veteranos y los que conocen la Champions al dedillo han dado un paso adelante como Sergio Ramos, Benzema o Modric, y en la que los Vinicius o Reguilón aportan esa sabia nueva que sueña con levantar su primera 'Orejona'.  Solari, quien este domingo hablaba en UEFA.com antes de los octavos, lo apuntaba claro: "¿La cuarta seguida? Para el Real Madrid nada es imposible".

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