El Real Madrid sacó con nota el último examen que tuvo que hacer frente en su semana más dura de la temporada. Tras cumplir en El Clásico y en el derbi, el conjunto blanco encarriló los octavos de Champions frente al Ajax con una victoria sufrida. Tras varios días de enormes fuerzas contra Barça y Atleti, el equipo llegó agotado a Amsterdam.

El Madrid sufrió, pero se fue con el triunfo bajo el brazo de vuelta a España. La culpa la tuvieron Vinicius, Benzema, Asensio... y Sergio Ramos. El capitán no marcó, pero su partido fue digno de estudio para cualquier central que esté empezando o que, incluso, lleve años de carrera a sus espaldas. Ramos estuvo omnipresente, fue un muro y tumbó casi cada ofensiva del Ajax.

"La mejor actuación que hayan visto mis ojos"

De su partido se ha destacado sobre todo la amarilla que forzó para pasar limpio a cuartos de final y por la que podría ser sancionado tras reconocerlo. Pero eso no puede empañar lo que fue un recital en defensa y que le regaló enormes elogios posteriores. De lo que más se habla es de lo que dijo el italiano Alessandro Costacurta, mítico zaguero del Milan de finales de los ochenta: "Su actuación defensiva contra el Ajax es probablemente la mejor actuación que hayan visto mis ojos", dijo.

No se equivocaba Costacurta y es que echando un vistazo a las estadísticas de Ramos en el partido se puede apreciar el calibre de su actuación: 86% de acciones con éxito, 88% de los pases buenos, diez intercepciones, quince recuperaciones y siete disputas ganadas. Un partido redondo del camero que pasa por uno de los mejores momentos de su carrera con 32 años, la madurez de un central de leyenda.

Porque Ramos sujetó y aguantó al Real Madrid en un momento muy complicado. El Ajax salió con todo y de no haber estado el capitán el castigo podría haber sido notable. El conjunto blanco ganó, pero si Courtois -quien tuvo varias apariciones destacadas- solo recibió un gol fue mérito de Ramos. Sin Varane y con un Nacho que no tuvo su mejor día, el '4' se hizo más grande. También se volcó a las bandas, donde sobre todo Carvajal pasó apuros.

El espíritu Ramos, siempre a disposición

El Real Madrid tiene líder de sobra, aunque no es algo que alguien vaya a descubrir ahora. El espíritu de Ramos le impide bajar los brazos y, pese a que haya pasado por diferentes momentos de forma, siempre se deja la piel en cada partido. Es un líder indiscutible capaz de aparecer en el momento que más le necesita su equipo. Y si es para sumarse al ataque también lo hace, por supuesto. Será una de las cualidades que no perderá jamás Ramos, como se vio contra el Girona en Copa.

El Madrid ha pasado por apuros físicos esta temporada, pero con Pintus al mando vuelve a sentirse fuerte y vuela sobre el campo. A ese ritmo va Sergio Ramos, quien no acusó nada de la fatiga que sí se pudo ver en alguno de sus compañeros fruto del esfuerzo de los recientes partidos. En el momento más decisivo de la temporada, Ramos vuelve para salvar a su equipo.

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