El final de febrero y el comienzo de marzo traen consigo emociones fuertes para los amantes del fútbol. Si El Clásico suele movilizar a millones de aficionados de medio mundo delante de un televisor, esta semana hay un particular 2x1.

Primero llega el duelo entre Real Madrid y Barcelona correspondiente a la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey. Después, el sábado se disputará en el Santiago Bernabéu el choque liguero entre los eternos rivales de la segunda vuelta del campeonato.

Tanto el conjunto merengue como los de Ernesto Valverde llegan a estas alturas de la temporada teniendo tres competiciones en juego -La Liga, la Copa del Rey y la Champions League-.

Sin embargo, una vez acabe esta semana, uno u otro equipo -o incluso los dos- ya no continuarán viviendo esta situación de la que ahora gusta presumir tanto a los clubes como también a los aficionados.

Este miércoles 27 de febrero (21:00 horas) el Santiago Bernabéu abre sus puertas para que la competición copera descubra quién será el primer finalista. El Real Madrid se juega el ser o no ser en la Copa, un torneo que no ganan los blancos desde la 2013/2014, con Carlo Ancelotti en el banquillo. Demasiado tiempo para un equipo que está acostumbrado al ganar un título, como mínimo, cada temporada.

Los de Santiago Hernán Solari cuentan a su favor con el resultado cosechado en el partido de ida en el Camp Nou. El Real Madrid dejó una muy buena imagen en territorio blaugrana, aunque finalmente solo pudo sacar un empate a 1 que dejó muy abierta la eliminatoria. Cualquier victoria, así como el resultado inicial dará como resultado al equipo merengue finalista de Copa. El Benito Villamarín, a la espera.

Y de El Clásico de la Copa del Rey al de La Liga. Una vez más el escenario será el templo madridista y en una fecha muy señalada: el sábado 2 de marzo o lo que es lo mismo, el sábado de Carnaval (20:45 horas).

En la primera vuelta del campeonato doméstico, el equipo blanco cayó goleado en el feudo blaugrana. Una derrota dolorosa no solo por lo abultado del resultado (5-1), sino también porque en aquel duelo no estuvo disponible Lionel Messi.

Cambios en el Real Madrid

Desde aquel partido del mes de octubre mucho ha cambiado el conjunto de Concha Espina. Primero, el entrenador. La derrota frente al Barça supuso el fin de la etapa de Julen Lopetegui como técnico merengue.

Su lugar desde entonces lo ocupa el argentino Solari, quien ha dado un nuevo rumbo al equipo, llegando a cotas muy altas de rendimiento, por ejemplo, ante el Atlético de Madrid en el Wanda Metropolitano.

La explosión de Vinicius Júnior también es otra de las más importantes novedades del conjunto blanco. Durante la 'era Lopetegui', el extremo brasileño tan solo disputó doce minutos con el primer equipo, aunque ya comenzó a destacar en las filas del Castilla, en el que, precisamente, estaba a los mandos Solari. El joven jugador de 18 años se ha hecho un hueco muy importante en la rotación y apunta a titular tanto en la Copa como en Liga frente al Barcelona.

Algunos de los otros grandes nombres propios en el cambio del Real Madrid son los de Luka Modric, Sergio Ramos o Karim Benzema. El primero ha recuperado su mejor versión, esa que le llevó a conquistar no solo al mundo del fútbol, sino también los grandes premios individuales del 2018, incluido el preciado Balón de Oro.

El segundo, el gran capitán. Sergio Ramos es el baluarte de este equipo y se motiva de forma especial en los Clásicos, al igual que el francés, quien está ejerciendo de líder desde que Cristiano dijese adiós el pasado mes de julio.

La ruleta rusa

Los blancos son, con 25 jornadas disputadas, terceros con 48 puntos a 9 del Barcelona, el líder de la tabla. De caer en casa contra el eterno rival el próximo sábado, el Real Madrid dirá prácticamente adiós a sus opciones de cantar el alirón.

De firmar tablas, La Liga se pondría muy cuesta arriba, pero todavía habría opciones para soñar. Mientras que de conseguir los tres puntos, el equipo merengue se colocaría a seis de los culés, dando así un golpe a la clasificación liguera.

El ser o no ser en Copa y Liga ha llegado para el Real Madrid. Menos de siete días en los que el conjunto blanco se juega más de media temporada: de permanecer vivos en tres competiciones a poder aferrarse tan solo a 'La Decimowanda'.

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