Jonathan Barnett se ha convertido en un personaje muy popular por ser el encargado de llevar la carrera de Gareth Bale. El británico está en la élite de los agentes de representación junto a otros ilustres nombres en este trabajo como Jorge Mendes, Mino Raiola o Pini Zahavi. Ha hecho de su empresa todo un imperio que no hace más que expandirse.

Su primer cliente fue el jugador de cricket Brian Lara. Pero es el atraer a Lennox Lewis al mundo del boxeo el que se considera como uno de los hitos más importantes que se le atribuyen desde entonces. Fue en el año 1994 cuando Jonathan Barnett y David Manasseh fundaron el Grupo Stellar. Una consultoría de deportes integral y multinacional.

25 años de dedicación en la promoción de los mejores talentos deportivos del planeta, a los que ayudan e impulsan para alcanzar el máximo de su potencial y convertirse en los mejores. Cientos de atletas a los que gestionan sus carreras. Así se presenta el Grupo Stellar, como "una de las empresas de gestión deportiva más grandes y exitosas en el mundo".

Este mismo 2019, Jonathan Barnett fue elegido como el agente deportivo con más poder del Reino Unido. Pero esto también se extiende a nivel internacional. Así lo ha remarcado la prestigiosa revista Forbes que ha colocado al británico como el tercer representante más poderoso del mundo. Esto va de la mano con que el Grupo Stellar haya ascendido hasta pasar a formar parte de las ocho agencias más valoradas.

"Mi intención es convertirme en el agente número uno a nivel mundial y que Stellar llegue a ser también la agencia más influyente del mundo. Vamos por el buen camino y, de acuerdo con los planes que tenemos para introducirnos en nuevos deportes y ofrecer nuevas oportunidades a nuestros clientes, estamos seguros de alcanzar las metas que nos hemos propuesto", dijo Barnett tras conocer las clasificaciones de Forbes.

Bale, su gallina de los huevos de oro

Jonathan Barnett se ha encargado de llevar la carrera de Bale. Él fue quien llevó al futbolista hasta el Real Madrid, después de una intensa negociación con Daniel Levy -dueño del Tottenham-. El extremo galés es la 'gallina de los huevos de oro' del Grupo Stellar y eso se puede ver solo con entrar a la oficina que tiene Barnett en un exclusivo barrio situado en el centro de Londres, en la que hay un mural gigante del futbolista de Cardiff.

"Solo tienen que preocuparse de jugar. Nosotros nos ocupamos de todo, de comprar sus coches, sus casas, de sus finanzas, de lo que comen...", asegura siempre Jonathan Barnett sobre los más de trescientos deportistas a los que llevan su carrera. Pero no solo es un lince en este tipo de operaciones, sino que también tiene otra cara mucho más polémica.

El conflicto con Zidane

Jonathan Barnett negoció la renovación de 'El Expreso de Cardiff' hasta el año 2022. Sin embargo, el futbolista está en la rampa de salida, siendo uno de los protagonistas del mercado de fichajes. Barnett se mantiene firme en su disposición de que Bale continúe jugando en el Santiago Bernabéu más allá del cierre de la ventana de transferencias, pero tanto el Real Madrid como Zinedine Zidane pretenden una venta.

El representante de Bale ha tenido para todos. Incluso para la afición: "Gareth merece el mayor de los respetos, la forma en la que la afición le ha tratado es poco menos que una desgracia". "Es uno de los mejores del mundo. Los aficionados deberían estar besándole los pies", dijo en marzo en Sky Sports. Ya entonces aseguró que "no se va a ir -Bale- a ninguna parte este verano".

A partir de entonces entró en un cruce de declaraciones con Zidane. Mientras el francés se ha mantenido firme en estos últimos meses sobre la salida del galés, Jonathan Barnett hablaba con distintos medios de comunicación cada vez que el entrenador francés hacía lo propio en rueda de prensa.Su última estocada la dio en Journal du Dimanche: "Es simple. A Zidane no le gusta Gareth. No hay relación entre ellos, nunca la ha habido".

"Basura", "mentira", son muchos los calificativos que ha utilizado el agente británico en este tiempo sobre las informaciones que colocaban a su representado fuera del Real Madrid. Lo cierto es que estuvo a un solo paso de irse a China y ahora se encuentra en una contrarreloj. Barnett debe encontrar una solución. Es un excelente hombre de negocios, pero esta vez puede estar dejándose llevar en una guerra personal.

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