Solo quedan ocho días para que cierre el mercado de fichajes y el Real Madrid ya ha sufrido el primer tropiezo de la temporada que devuelve las dudas en torno al equipo. El club blanco sufrió un empate contra el Valladolid en partido que tuvo dominado, sobre todo en la primera parte, y que no supo encarrilar tras marcar el 1-0 ya en la recta final del partido.

La imagen del equipo en los primeros 45 minutos fue buena, pero perdonó varias ocasiones claras y tener el control el encuentro. Varias ocasiones de James desde la frontal, las intentonas de Bale, el larguero de Jovic en la primera que tuvo... El Madrid lo intentó de todas las maneras, pero solo Benzema marcó. Como el año pasado, el '9' fue quien estuvo a punto de salvar los tres puntos del equipo, pero no bastó.

Benzema ha empezado el curso como empezó el anterior. Ya ha marcado en las dos jornadas iniciales y ha demostrado que no ha perdido el gol (metió 30 goles el año pasado). Nadie discute a Karim y Jovic ha llegado para aportar más pólvora, partiendo de momento desde el banquillo. Sin embargo, el equipo necesita también de los goles de los Bale, Vinicius, James, Isco y de Hazard cuando vuelva de su lesión.

La pregunta es si con ellos es suficiente. Hazard es la esperanza, mientras que a Bale y James se les vio muy activos de cara a puerta. La plantilla del Madrid goza de diversos recursos ofensivos, pero sigue siendo inevitable mirar fuera ante la falta de gol que se vio ante el equipo pucelano. Y hay un nombre señalado: Neymar Jr.

Gol, desequilibrio y velocidad

A falta de gol, se notó ausencia de desequilibrio y velocidad en el equipo. Lo primero se palió durante los primeros minutos de Vinicius en el campo hasta que pasó a la derecha. Neymar reúne las tres cualidades y se presenta como la mejor solución a ocho días de cerrarse el mercado de fichajes, siendo el gran protagonista en sus últimos días.

Neymar es una solución y una oportunidad. El Real Madrid va a por su fichaje, mientras el Barça se topa una y otra vez contra un muro llamado PSG. Las negociaciones no son fáciles para ninguno de los dos clubes. El club blanco busca incluir alguno de sus jugadores en la operación y los culés solo les queda lanzar una arriesgada oferta a la desesperada que convenza en el Parque de los Príncipes.

Con el Barça en jaque y Neymar buscando una salida a toda costa del PSG, el Madrid tiene delante suya una gran oportunidad que ahora se presenta como una necesidad. Neymar tiene el gol que le falta al Madrid, pero el club blanco ha de moverse rápido. Queda casi una semana para poder cerrar su fichaje, una operación que sería un golpe de efecto a grandes niveles.

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