Conseguir un sitio en el nuevo Real Madrid de Zinedine Zidane está muy caro. La plantilla del conjunto blanco no ha tenido grandes fichajes galácticos este verano, al margen de Eden Hazard, pero la competencia se ha disparado. El proyecto ha abierto candidaturas para encontrar nuevos líderes del equipo. Algo para lo que muchos jugadores están intentando postular con vistas a convencer al técnico francés. 

Uno de ellos es Vinicius Júnior. El que fuera jugador del Flamengo y recalara en el Real Madrid en 2018 es una de las grandes apuestas del club blanco de cara al futuro. Los blancos tienen plena confianza en su progresión y el brasileño se ha erigido como una de las grandes ilusiones del madridismo para la temporada 2019/2020. 

En el Real Madrid esperan que este sea el año de confirmación del joven delantero. Tras una primera temporada de adaptación en la que sorprendió a todos echándose el equipo a la espalda con Santiago Solari en el banquillo, este curso tiene ante sí la papeleta de tener que convencer a Zidane para tener un sitio importante en su proyecto. 

La competencia madridista 

Vinicius sabe que no tendrá fácil ganarse un puesto, pero él está trabajando por conseguirlo. El mirlo blanco sabe que Gareth Bale y James Rodríguez han reaparecido en el foco mediático del Real Madrid con rendimientos excelsos, algo que unido a la recuperación de Hazard, le perjudica directamente. 

A pesar de ello el jugador no se distrae de su objetivo: ganarse la confianza de Zidane aprovechando sus oportunidades. Vinicius reconoció en las últimas semanas que le está costando adaptarse en esta nueva etapa, ya que muchas veces juega en una posición desconocida hasta el momento para él (banda derecha). Sin embargo, contra el Levante volvió al costado zurdo y mostró brotes verdes en su rendimiento. 

Titular contra el Levante 

Vinicius fue titular ante los granotas en el Bernabéu y dejó grandes destellos de su calidad. Brilló en el que fue el gol clave del partido, el tercero, el que evitó que a la postre el Real Madrid se dejara puntos y empatara ante su público. El delantero ganó la espalda a la defensa del Levante y asistió a Casemiro para poner el 3-0 en el marcador. 

No contento con eso, el joven delantero buscaba más, quería conseguir su gol. Un objetivo que tuvo entre ceja y ceja y estuvo muy cerca de conseguir. De hecho, el árbitro del encuentro, De Burgos Bengoetxea, le anuló un gol en el minuto 62 por fuera de juego de James, y Vinicius estuvo muy cerca de perforar la meta de Aitor en la recta final del encuentro, aunque una buena parada del meta rival lo evitó. 

Zidane confía en él

El brasileño está demostrando que se encuentra mentalmente concentrado en su carrera para ganarse un sitio importante en el equipo. Zidane sabe que buena parte del futuro del Real Madrid pasa por las botas de Vinicius, incluso él mismo lo ha ratificado públicamente. 

"Vinicius tiene la confianza de su entrenador que soy yo. Pero cuento con los 23 jugadores. Él es el futuro del Real Madrid, pero cada cosa lleva su tiempo. A veces no va a jugar, pero confío plenamente en él", espetó el técnico en la rueda de prensa previa al partido contra el Levante. 

Ahora el balón sigue en el tejado de Vinicius, ya que es el propio jugador quien debe seguir conquistando a Zidane desde el terreno de juego. Con fútbol. Demostrando su arsenal ofensivo y su capacidad de poder ser uno de los líderes del futuro del Real Madrid. 

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